POR UNA
CABEZA
Me
criaron entre tangos, probablemente de allí me viene cierta melancolía, porque
nunca escuché uno alegre. Lo que si me resultaba mucho, era ver como mi Padre
se lucía con nuestros invitados, con esa hombría a toda prueba y su voz grave
para la interpretación, porque los tangos, (como dice uno) tienen “olor a
sangre y tienen gusto a muerte”. Pero hay uno que compusieron entre el famoso
Carlos Gardel y su amigo Alfredo Le Pera en 1935 y es de hacer notar que se
trataba de las carreras de caballos, una de sus aficiones, cuando a la llegada,
el ganador lo hacía tan solo por una cabeza. Ambos mueren en el mismo avión.
De
quien quiero hablarles fue encubado conmigo en la misma placenta, me refiero a
la Escuela Naval y nos conocimos niños, aún faltaba un tiempito para cumplir
los veintes y nos graduamos y nos criaron en las cubiertas grises de los buques
de línea y alguna vez nos separamos geográficamente. Él se fue a Brasil,
mientras yo estaba en Norfolk, él estudio artillería, mientras yo estudiaba
maniobras de buques y operaciones en Panamá, pero siempre convergíamos y fuimos
comandantes en el mismo escuadrón y vimos nacer a nuestros hijos.
Inteligente
a lo sumo y ¿Cómo no va a serlo?
La
talla de mi gorra era de 6 7/8, mientras que la de él pasaba sobradamente la
talla 7.
Gustavo
Adolfo llegó a asegurar que un dolor de cabeza de Francisco David, era una
suerte de detonación de varios megatones. Otros llegaron a decir que no usaba
una gorra sino una carpa. Envidias de muchachos por su brillantez y simpatía,
por su humildad y carácter, por sus talentos que sobrepasan holgadamente su
estatura, porque él no es alto, sino grande, por cuanto la altura de un hombre
se mide de la cabeza a los pies, pero la grandeza se mide de la cabeza hacia
arriba y ese es el caso de Francisco David Cantón Maldonado.
Muchas
horas de navegación, semanas, meses juntos, mientras él me entrenaba en un tipo
de buque y vinimos a Fort Lauderdale, en su bordo que luego fue mío y me
entregó un gran buque de guerra con excepcionales y entrenados oficiales y
marineros.
Hoy
29 de Diciembre está de cumpleaños y su amistad me honra en los casi cuarenta años
de singladura.
De
piel negra y corazón blanco, me llegó a decir cuando la muerte le visitó, lleno
de cables y desnudo en la terapia intensiva, con lágrimas en los ojos, que él
lo que quería era conocer a sus nietos y creemos todos sus amigos, (que somos
muchos), que lo logrará sobradamente, porque los hombres buenos le ganan a la
muerte por más de una cabeza y cuando se tiene una de su talla, es aún más
fácil.
La
vida nos pone en los caminos y de allí tomamos los frutos que comeremos a lo
largo de ella. Nuestra común amistad es uno dulce y lleno de buenas historias,
de cuentos y chanzas.
Larga
vida y feliz cumpleaños, mi querido, afable y siempre cercano amigo, seguiremos
juntos y veremos nacer a nuestros nietos.
Tremendo regalo de cumpleaños para el siempre estimado CN Catón Maldonado, felicidades.
ReplyDeletesaludos, felicitaciones al cumpleañero y que dios nos proteja un tiempo mas...
ReplyDeletefelicidades en al medida de lo posible en esta temporada de cambio de fecha,,,...ya la navidad pasò...y el niño dios anda por ahì...