LA CAJA NEGRA DE MADURO

LA CAJA NEGRA DE MADURO

            ¿A que no sabes que hay dentro de una caja negra?

            Hay varios tipos de cajas negras, que realmente son registradores de la actividad de una plataforma que puede ser por ejemplo un tren y más comúnmente un avión, pero Nicolás Maduro tiene la de él que va registrando muchas cosas.

            “Se denomina caja negra o registrador de vuelo al dispositivo que, principalmente en las aeronaves y coches motores o locomotoras de trenes, registra la actividad de los instrumentos y las conversaciones en la cabina. Su función es almacenar datos que, en caso de un accidente, permitan analizar lo ocurrido en los momentos previos”.

            Realmente lo de negra se le puso porque siempre se hace uso de ellas tras una tragedia, en un “día negro”, pero hoy en día son de color naranja para poder facilitar encontrarlas entre los escombros, bajo el agua o en cualquier paraje inhóspito.

            En mi más reciente novela titulada “370 Norte o Sur“ continua vigente la hipótesis desarrollada por cuanto es un texto de ficción basado en hechos reales y mientras no se consigan las cajas negras, pues, se mantiene mi hipótesis del secuestro…creo que deben leerla.

            “Como ocurre con tantos otros inventos sofisticados, no tiene un único inventor, pero el primer prototipo de caja negra, data del año de 1939 y fue diseñado por el ingeniero francés Francois Hussenot. Se trataba de una rudimentaria caja hecha con film fotográfico calibrada con espejos. Los sensores a bordo lanzaban flashes en el film fotográfico y así se registraba el historial del vuelo. Consciente de lo importante de su invento, se dice que Hussenot escondió la caja del ejército nazi invasor de su patria, enterrándola cerca de una playa del Océano Atlántico en junio de 1940. Y como también ocurre con tantos avances tecnológicos, la guerra perfeccionó la tecnología, que se extendió a los vuelos comerciales en todo el mundo. Después de la Segunda Guerra Mundial, algunos dispositivos usaban fotografía y otros imprimían los datos en bobinas de aluminio”.

            La verdad es que en tantos años operando con aeronaves militares en mi época en la Armada jamás vi una caja negra por dentro, por cuanto están selladas y siempre son sometidas a las siguientes pruebas:

“Prueba de impacto: una pistola de gas lanza el registrador contra un blanco de aluminio, produciendo una fuerza máxima de 3.500 kilos.

Prueba de resistencia a la penetración: se deja caer sobre el aparato, desde tres metros de altura, una masa de 225 kilos provista de una punta de acero templado.

Prueba de aplastamiento estático: un actuador aplica una compresión de 2.300 kilopondios.

Prueba de inmersión a gran profundidad: el registrador debe resistir 24 horas en una cámara llena de agua marina a presión.

Prueba de ignifugación: se le somete a llamas de 1.100 °C.”

            Recomiendo dos cosas: en primer lugar que Maduro sea objeto de las pruebas prenombradas y luego de ellas, que abramos su caja negra para hacer también el correspondiente examen de heces.