LA COPA ROTA

LA COPA ROTA

            Pueden buscar el mejor de los pegamentos  en el primer mundo, pueden también buscar y pagar al mejor de los artesanos para que haga el trabajo, pero jamás podrán dejar la copa en su estado original. Así son las reputaciones, también la virginidad y en mayor grado, así es la desilusión.

            Nadie cree que el gobiernucho va bien y este aserto incluye a Nicolás Maduro a Cilia, a Aristóbulo y Diosdado.

            Por cierto, que si me invitaran a bautizar a algún niño llamado Aristóbulo o Diosdado, no lo dudaría ni por un segundo, porque ya sería una carga suficiente ostentar esos nombres cuasi elitescos.

            La copa está rota, está hecha añicos y no saben cómo repararla por el simple hecho de que ya no tiene ni acepta ninguna reparación. No quiero imaginarme esas conversaciones de cama, no quiero ni pensar en esa esposa del  Comandante del regimiento de la Guardia Nacional que reclama airada, tanto el riesgo de vida de su marido, como el inepto gobierno al que defiende, porque hay otra lectura mi querido lector: ¿se han dado cuenta que con todo un país revuelto no han sacado al Ejército ni a los Infantes de Marina? ¿Por qué creen que no usan esa fuerza que está allí supuestamente a la orden?, pues les contesto, ¡porque bien saben que se les van a voltear!

            Fíjense lo que paso a relatar: como algunos saben, yo fui militar naval, que a mi juicio hace una diferencia, pero para aquellos individuos de tierra, después de cuarenta días de repudio, de hambre, de hastío, de maltrato, les aseguro que ya no dan más y es probable que Usted no me crea, cosa que me tiene sin cuidado, pero no le miento, ¡es fácil determinar esto!

            Este es un blog para personas inteligentes y de buen humor, aunque en estos tiempos escasean ambas, no es una crónica periodística, de manera que le invito a abrir su mente preguntándose: ¿Qué creen Ustedes que piensa después de la avalancha de venezolanos en la exclusiva urbanización en Orlando Florida, el vecino americano del Almirante Carlos Aniasi Turchio?, como es evidente ya deben estar redactando lo que se llama el “Complain ante el board de propietarios”, me refiero al reclamo ante la junta de condominio, porque nadie desea tener a un vecino tan indeseable por la comunidad. Ni siquiera a los sicarios, narcotraficantes de baja laya, a los mafiosos connotados de la peor época del Chicago de Capone, la pasaba esto.

            Podría seguir esgrimiendo casos que todos hemos visto en las redes sociales, como el de la joven Rodríguez en Australia o el infeliz afeminado sacado a trompicones del Don Pan del Doral, pero no tiene sentido, porque la copa ya está rota y me temo que antes del próximo tribunal de Núremberg que se llevará a cabo cuando recojamos los pedazos de la copa, la vergüenza de haber contribuido al desfalco más grande de la humanidad (y no exagero con esto) es un ultraje inolvidable a la fenecida revolución que solo existió para robar, violar, destruir, mal educar, asaltar y romper las copas de la decencia y el orgullo de la venezolanidad.