¿SANGRE O MERMELADA?

¿SANGRE O MERMELADA?

            ¡Que levantes las manos infeliz!, ¡esto es un asalto!, no te lo voy a repetir, le decía el malhechor.

            ¿Pero disculpe, Usted no cree que podríamos sentarnos a discutir?, de acuerdo al Código Orgánico Procesal Penal, esto que Usted hace conmigo le podría costar algunos años de cárcel. Mire, hablando se entiende la gente y Usted tiene cara de ser bueno, no me mate, que yo le doy todo, además por allí debe venir mi hija, que tiene veintitrés añitos y está bella y seguro le va a gustar a Usted.

            El malhechor: ¡Te vamos a secuestrar a ti, a tu mujer y a tu hija también!

            La víctima: pero eso también podríamos discutirlo, eso me quitaría mi libertad y yo quisiera discutir mi libertad, además podríamos juntos hacer unas votaciones entre todos para ver qué solución conseguimos, de manera democrática, Usted sabe y para mayor seguridad suya, uno de sus cómplices sería quien contara los votos para evitar la trampa. Si nosotros ganamos la votación, seguramente no nos va a secuestrar, tampoco nos va a robar, además ni nos va a asesinar y mi casa, que por supuesto es suya también, la seguiremos conservando y podrá venir a visitarnos cuando quiera, y hasta se podrá hacer novio de mi hija. Si algún día está un poco corto de dinero, no hace falta que me apunte con ese revolver tan feo, simplemente en la negociación podríamos discutir que yo le diera una mesada de lo que ganamos, ¡todos somos venezolanos!

            Lo lamento pero me faltó en la historia el sitio donde se estaba llevando a cabo la tropelía y creo necesitar ayuda, debo ponerle el contexto geográfico, si, es difícil escribir cuentos y sobre todo uno de terror, no soy muy bueno en esto, de manera que se me ocurre ponerle ¿República Dominicana?, sí, me gusta.

            Winston Churchill, tuvo que tragar grueso para sentarse en la misma mesa a dialogar con Stalin, me temo que no se soportaban, también tuvo que hacerlo contra la arrogancia francesa de Charles de Gaulle y con su partner Franklin Delano Roosevelt y todas esas reuniones eran para ponerse de acuerdo y acabar con el asaltante de Adolf Hitler, pero miren que he buscado por décadas en la historia y nada sale de una reunión de Churchill con Hitler, ¡porque Hitler era el enemigo!, era el asaltante, era el secuestrador y asesino, hambreador, el peligro para la paz no solo de Inglaterra sino del planeta entero y ya saben los resultados a favor de la libertad.

            En la Republica Dominicana, se encuentran reunidos miembros de la Mesa de la Unidad y el Gobierno y hasta ahora nadie sabe cuál es la parte de la libertad, de la hambruna, del asalto, de la dignidad, de la inflación, de las elecciones, de las medicinas, del dólar, de los presos políticos, de los muertos, nadie sabe nada de nada, sobre que se negocia, cuando el enemigo son todos los saqueadores ladinos de este gobierno.

            Con frecuencia pienso que no tienen sangre sino mermelada.