CANTERA DEL MAR

CANTERA DEL MAR

            Iba manejando mi nuevo carro, que requiere una especie de escuela en tierra antes de, porque la tecnología debe ser estudiada y explicada, tanto, que apreté un botón que se encuentra debajo del espejo retrovisor protegido por una puertecilla plástica transparente, como pasaba en el sistema IPN 10 a bordo de las fragatas y de repente sonó mi teléfono celular con una voz profesional que salió por el blue tooth, que me preguntó qué clase de emergencia tenía.

            I don’t have any emergency Sir, contesté alarmado…. quien es usted?

            ¿Usted ha apretado su botón de emergencias, necesita asistencia? ¿Un helicóptero?, ¿llamamos a la policía?, porque le tenemos en posición vía satélite, le estamos monitoreando, me contestó en perfecto inglés.

            Cancelé la ayuda, aduciendo que me equivoqué y al otro lado del auricular sentí como esta persona a la que no conozco, pensaba sobre la clase de pendejos con la que debía lidiar mientras manejan estos carros.

            Acto seguido, una vez abierta la válvula del estrés, depurado mi pensamiento, me llegó la pregunta sobre cuantos oficiales navales han escrito libros para la editorial en los últimos once años y me sorprendí, no los había contado. Escritores a cuáles más brillantes ha dado la Armada de Venezuela.

            A mi amigo y discípulo Pedro Pedrosa, esos hijos queridos que te deja la profesión, le editamos ‘Así se exportó la revolución’ un estudio concienzudo de como el socialismo se logró colar en la democracia, junto a sus causas y consecuencias. Altamente recomendable.

            Un buen día, mi ahora admirado socio e intelectual de alta monta, el Capitán de Navío Eddy Barrios, me llamó para informarme sobre una novela que había hecho, titulada ‘Marino Rumbos’ Yo le pedí que me la enviara y al leerla, no pude desprenderme de su prosa cautivadora y la editamos.

            Mi admirado amigo, uno de los hombres más pragmáticos que conozco, un individuo de serenidad a prueba de balas en la mar, un maniobrista de buques con densidad testicular, el Vicealmirante Julio Chacón, fue objeto de mis engaños, pero se lo merecía, lo engañé con toda maldad y le propuse escribir un libro a dos manos y cayó en la trampa y le editamos ‘El obstáculo de la realidad’ Que mantengo en mi mesa de noche como libro diario de consulta y que cualquier humano posmoderno debe leer.

            El Vicealmirante Germán Rodríguez Citraro, de quien aseguro equivocó su profesión, porque su calidad novelística, su profundidad investigativa es digna del Nobel de la academia y no exagero, a quien le hemos editado cuatro libros a cuál mejores con ‘La hermandad del Trisquelion’ en dos tomos que hace una saga cautivadora, ‘Relatos de mujeres’ y ‘ F.U.E.L.’ una obra llena de prestidigitación sobre lo que acontece y pasará en la Venezuela de la revolución.

            Luego recibí una bendita noche, la llamada de Pablo Cohen Celis y afinó la trama de su ya famosa novela ‘El último reporte’ que ha marcado la vida de muchas personas en aquel trágico accidente del hundimiento del submarino argentino ARA San Juan.

            Este es un grato oficio, esta es una bendición y con frecuencia tengo la misma sensación de Cristóbal Colón al descubrir el nuevo mundo. La Armada es una cantera de escritores, forjados en la mar.

Bernardo Jurado es el director de ‘Jurado, grupo editorial’, para escritores consagrados y noveles.