MINTIENDOLE A TU ABOGADO
De
acuerdo a las pruebas conclusivas, en el hurto del vehículo, el caballero
Manolo Pérez, quien dice ser gitano, se considera inocente del hecho y a partir
de este momento, esta corte le otorga libertad plena.
El gitano pregunta: Disculpe su Señoría,
¿entonces esto quiere decir que me puedo quedar con el carro que me robé?
Sospechamos
todos, que tu abogado no solo tiene las mejores intenciones de defenderte, de
comprobar tu inocencia y de no serlo, pues, de usar todas las artimañas y
vericuetos legales para procurar tu libertad, pero para ello, indudablemente
debe tener toda la verdad, toda tu verdad, la realidad de los hechos y preparar
las respuestas y las excusas válidas para cada ataque de la fiscalía.
Algo
muy similar ocurre con tu mente, tu gran abogado y con frecuencia para aquellos
que aún tienen valores, también tu gran juez. Puedes mentirle, puedes mentirte,
pero siempre estará esperando el momento de sorprenderte con la pared de hormigón
en que se convierte la realidad, ese obstáculo que tú mismo creaste por
mentirle a tu abogado, como fue plasmado en la obra “El obstáculo de la
realidad” del escritor Julio Chacón.
Primero
se agarra a un mentiroso que a un cojo, dice con frecuencia mi madre política y
aseguro que es así. Primero agarrarás a tu mentiroso, o tal vez y mucho peor, él
te agarrará a ti, de manera que debes comprender que la mentira te saca momentáneamente
de esa penosa situación en contra de tu falta de templanza, te entiendo, todos
sin excepción poseemos ese lado oscuro, pecaminoso, bandido, lo que ocurre es
que unos lo dominan, dominan a su miserable y otros ni siquiera lo ocultan,
pero todos los tenemos, como bien lo reflejara Víctor Hugo en la obra “Los
Miserables”
Si
te mientes y no enfrentas la realidad que te mortifica momentáneamente,
simplemente estas trabajando en tu contra, lo mejor es enfrentarla, desafiarla,
aceptar los errores y purgar las culpas o la otra cara, deberás inventar una
mentira más grande para tapar la anterior y otra y otra, hasta que todo tu
transitar por aquí, sea una fábula absurda y ya el abogado de tu psiquis no
pueda defenderte y el juez de tu conciencia te declare culpable de estúpido, de
infeliz a propósito y de absurdo.
La
mentira es tan mala, que hasta se nota.
Manolo
Pérez: ¿se robó Usted ese carro? Y si llegase a contestar NO, ese no, sabemos
todos que es un sí, mientras el abogado se revuelca de ira por la traición de
su cliente al mentirle a quien debe defenderlo y como humano, pierde todo interés
en el bienestar de Manolo. ¡Que se joda!, podrá decir el letrado en su mente,
mientras la mente de Manolo, esa a la que no puede engañar, repite la misma
frase.
Con
la mentira, (herramienta usada con habilidad por muchos), seguramente podrás
llegar muy lejos, pero, malas noticias: ¡jamás podrás devolverte!
Viví un año en Sevilla y allá los gitanos tienen dichos muy acertados por sabios y muy sabrosos al oído.
ReplyDeleteUno es el de "Más vale una vara de juez que un kilómetro de justicia" y el que más se aplica a ti escrito :"Sí te acusan de haberte robado 100.000 pesetas y eres inocente estas Jodido, si en verdad eres culpable ...te salvaste"