LOS SECRETOS DE VICTORIA

LOS SECRETOS DE VICTORIA

            Tenemos, Victoria y yo, esa extraña relación de amor odio que no termino de entender, ella, Victoria, cada día vende más, en una relación inversamente proporcional al tamaño, por ejemplo, en la medida en que la pieza es más pequeña, infiero que más incómoda, pero más sexy, es más cara, cosas que nunca terminaré de entender, pero los hombres le siguen comprando a sus damas, las minúsculas piezas que durarán muy poco sobre el cuerpo de ellas.

            Victoria tiene varios secretos, en primer lugar, creo que es el pecado el motor de su éxito, créanme, es pecaminosa y encantadora, como todo lo prohibido. Victoria’s Secret fue fundada como compañía en 1977 por el Señor Roy Raymond y su esposa Gaye, en San Francisco, California, exactamente el 12 de Junio y algún día se sintió perturbado al ir a comprarle ropa a su esposa y decidió que montaría la compañía de ropa femenina donde tanto las damas, como los caballeros se sintieran cómodos y así nació la enemiga de nuestros bolsillos, que por aquí en la ciudad está en un Mall.

            Ofertas imposibles de evitar hacen que su éxito se exponencie. Cinco pantaletas a escoger por tan solo $20, no es nada despreciable, por esa prenda que puede ser removida fácilmente usando los dientes, esa prenda que simula piel de leoparda, de tigra, de caimana, de culebra, de cualquier animal feroz y depredador.

            A mí me gustan mucho, son realmente sensuales y provocativas, considero que la Alcaldía debería hacer una orden especial, un decreto con rango de ley, donde todas las damas usaran las prendas de Victoria’s Secret obligatoriamente y poner al editor de este periódico a chequear el estricto cumplimiento.

            No es un pecado usarlas, no, de ninguna manera. Lo que es incorrecto, desde mi mojigato punto de vista, es usar la tarjeta de crédito de la ciudad, esa que se les da a los concejales, a manera de pagar estrictamente y con suma moderación algunos gastos de representación para comprar cosas en la tienda que guarda los Secretos de Victoria, esto es un hecho ocurrido hace ya algún tiempo y llevado a cabo en mala hora por nuestra amiga la actual concejal Sandra Ruiz, quien ahora entra (en buena hora), para los efectos de escogencia de los votantes a competir para ser Alcalde, contra Juan Carlos Bermúdez y Luigi Boria.

            Por favor quiero aclarar que esto no es nada personal, no me interesa la ropa interior que usa la respetable y calificada candidata, pero creo que debemos, con todo respeto, revisar el irrespeto.

            Debemos también revisar aquella investigación que costó una pequeña fortuna al erario público, quienes terminaron averiguando que aquel email enviado a la concejal Ruiz amenazándola, había salido de su misma computadora y tuvo que pagar una escueta multa, pero créanme que eso no es importante, les recomiendo que no lo recuerden a la hora de votar. Lo que si deben recordar es que en este país de libertades puedes hacer de todo, menos dos cositas: la primera es que no debes violar la ley y la segunda es que no debes mentir a la autoridad y si acaso eres un funcionario público, pues, como es de esperar, las cosas toman un intenso color de hormiga de esas que pican muy duro.

            Siendo equilibrados, luego de este par de incontrovertibles y públicos hechos, debemos ser justos, si, aun mas, porque la respetable concejal, nunca ha sido acusada de nada, inclusive de las denuncias de abuso y malos tratos al personal, no han pasado de ser denuncias y probablemente infundadas porque yo sigo confiando en este sistema de justicia.

            Al ser confiado del sistema yo solicito a los respetables miembros del concejo de la ciudad mi tarjeta de crédito para comprarle cosillas a mi esposa, es mi derecho y como no soy funcionario electo, infiero que les puedo mentir y nada me pasará.

            Bienvenidos todos los candidatos posibles a la contienda, a la fiesta democrática, a la diversidad en la escogencia, porque no es sano tener solo a tres excelentes candidatos, en la ciudad hay mucho talento y así podríamos obtener esa variedad que no tenemos en las presidenciales que no nos permiten y que nos amarran a escoger entre el sida o el cáncer, ¡no está fácil esto!

            La candidata y ex secretaria de Estado Hillary Clinton, debe aclarar un par de cositas también: el caso Bengazhi donde falleció nuestro embajador a manos de terroristas sin haber recibido apoyo y el caso de…. ¿Los emails?, ¿Qué casualidad? En todo caso, el sistema seguirá funcionando a favor de todos nosotros y si llegáramos a la tienda Victoria Secret y preguntáramos a las damas presentes sus apetencias en materia de candidato, paradójicamente el 60% de ellas no quieren al candidato Donald Trump y miren que las damas tienen un sexto sentido y además un altísimo umbral para el dolor, tanto, que son capaces de usar altos tacones junto a un sharong de la amiga Victoria, pueden parir y en poco tiempo caminan, son susceptibles de someterse a depilaciones infames y dolorosas y de paso son más inteligentes y hábiles que la gran mayoría de todos mis amigos juntos, incluyéndome a mí y por supuesto al editor.

            Donald, por su parte, sigue hablando más de lo que a mi juicio se desea, probablemente yo esté paranoico, pero me lo imagino en cadena nacional de radio y televisión, inaugurando la Alcaldía Trump, tal vez una cadena de tiendas gubernamentales Trump’s Secret, diciéndole a su bella esposa (en inglés, por supuesto) “esta noche te voy a dar lo tuyo” como lo hizo Hugo Chávez cuando compró a Venezuela. Les informo que me da cierto miedo verlo como Presidente, verlo como Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas más potentes del orbe, verlo como el máximo líder del mundo libre, pero que aúpa el odio, la diferencia, la  distorsión de los valores eternos de la constitución de hace más de doscientos años, porque cuando los padres inmigrantes de Trump, junto con sus esposas inmigrantes, llegaron a estas tierras, ya existía la constitución y probablemente Donald no lo sepa. Posee también algunos puntos oscuros con una institución que no tiene buen humor, el IRS y si no están oscuros, creo que debe aclararlo completamente, para tranquilidad de sus votantes, de manera que esto está divertido, mucho diría yo, porque el que desee ser político debe someterse a una investigación permanente, sistemática y exhaustiva de su vida privada, por eso les digo a quienes se disgusten con mis letras, que no pierdan su tiempo investigándome, yo les ahorraría dinero diciéndoselos todo y eso incluye,(con el perdón de ellas) a mis amantes, que si bien no han sido muchas, a todas he intentado dotar, con mi frágil bolsillo, de alguna prenda de Victoria Secret que se acomode al gusto de mi escueta tarjeta de crédito personal.

            En la contienda por nuestra Alcaldía… ¡que gane el mejor!