UNA LUZ EN VILLA NUEVA
Y el
tiempo, que tiene sus malcriadeces, pasa dependiendo en ‘para que’, ‘como’ y ‘por
donde’, porque si pasa mientras nos divertimos como en la fiesta de anoche se
los debo contar y allí voy: fue en un sitio que conocí llamado ‘La terraza’,
alumbrado glamurosamente y la noche me pasó como si fuera un minuto, además tenía
open bar y el anfitrión fue como es él, de lo más atento, amable, se encarga,
hace su tarea, porque nos hizo sentir como si fuéramos los mas importantes de
la velada que por cierto fue amenizada por un cantante emergente y con
suficiente talento para regalarle a Bad Bunny y demás tirapiedras que destrozan
el pentagrama, pero este joven de nombre Frank Croker, venezolano y alegre,
humilde e inteligente nos formó en parte del cómplice equipo. Mi esposa y yo estábamos
encantados, bailamos, si, bailamos mucho y reímos a mas no poder y de repente
aparece uno de mis escritores, que además es famoso por ser un cantante de
vieja data y que se llama Nelson Arrieta, con ese tono metálico inconfundible
que rememora y mueve las dendritas de cualquier venezolano de cualquier época y
allí pasamos sin darnos cuenta del ‘para que’ al ‘como’
Nelson
Arrieta, mi amigo admirado le cantó a la cumpleañera y la fiesta se exponenció
y hasta yo me sentí aludido cuando dijo a quemarropa: ‘Esta noche todos tenemos
cuarenta años’ En alusión directa a la edad de la anfitriona y resulta que nos
comportamos como de la mitad, o sea, de veinte.
Villa
Nueva es un pueblo del Estado Lara en Venezuela y me temo que es pequeño, jamás
lo conocí y creo que no lo conoceré.
En
este momento y por imperativo del poco papel que me queda debo pasar al ‘como
ha pasado el tiempo’, porque ha pasado bien, ha sido amable y además ha sido
luminoso como la noche de anoche.
La fiesta descrita del ‘para que, y del como’ era para celebrar los cuarenta años de nuestra amiga Luz, a quien no he pedido permiso para escribir sobre ella, pero no me importa, porque, aunque algún malvado escritor quisiera hacerlo, ella tiene la inmensa ventaja de proyectar con angelical y honesta actitud, la bondad de un hogar que lleva junto a su esposo y dos hijos lindos.
El ‘cómo’ fue sublime y al llegar inmediatamente la foto en el bellísimo lugar que preparó el marido y nos sentimos ‘como’ orgullosos de haber sido invitados, también ‘como’ honrados, ‘como’ queridos, ‘como’ divertidos, ‘como’ atendidos, ‘como’ ebrios, ‘como’ locos y ¿saben porque todo esto? Porque Luz, la amable señora Luz celebraba sus cuarenta años de edad y ella nació en Villa Nueva y anoche alumbramos nuestra alma con su luz y me he dado cuenta que es Aristóteles el culpable cuando escribió ‘Una amistad es una sola alma en dos cuerpos’
Felicitamos
a esa bella familia que junto a nosotros comerciamos cariño por doquier,
felicitamos a la vida que nos permite amigos de esa inmensa categoría y
felicitamos a Villa Nueva, por habernos dado a Luz.
Bernardo Jurado es CEO de Jurado Grupo Editorial, con representación en USA, España, Chile, Ecuador y Costa Rica.
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