UNIVERSOS PARALELOS
Si
no hubiese tomado la decisión de separarme de esa mujer, estaría realmente
amargado. Probablemente hubiese somatizado en alguna enfermedad terminal, el
mal vivir y las rabietas en ráfaga que me procuraban sus desaciertos, su falta
de cultura, pero habría mantenido la casa que me gustaba tanto, ese jardín lleno
de flores y mi biblioteca.
Es un
universo paralelo, porque te divorciaste, te separaste de la mal viviente, aun
tienes salud. ¿Qué haces pensando en si no lo hubiese hecho?
Me gustaba
la ingeniería, realmente me gustaba, pero decidí estudiar leyes por culpa de aquel
absurdo profesor de mecánica de los fluidos, pero si me hubiese graduado de
ingeniero, hubiese hecho grandes desarrollos habitacionales, que es realmente
lo que me gusta. Hubiese construido un gran rascacielos en el Down Town de
Miami, con vista al mar y embarcadero para yates y la más hermosa piscina
infinita, que es como llaman a esas cuyo borde de difumina en el horizonte;
pero soy abogado y hasta constituyente fui en la época de Chávez, fui famoso
por mis opiniones y si bien es cierto no construí edificios, pues hice lo mejor
que pude a favor de mi país, realmente con sinceridad, mientras mi hermano también
abogado estaba del otro lado, apoyaba la revolución y hasta murió siendo un
ícono de ella. Ambos teníamos una vocación de profesores, pero también había un
ego que competía, sí; era un universo perfectamente paralelo el de mi hermano y
el mío, era como si lo hubiesen diseñado para andar por vías diferentes pero
paralelas, jamás se encontrarían hasta que alguno de los dos cambiara el rumbo
y yo lo hice, pero mi hermano había muerto en un hotel con una amante y cuando
crucé su línea él estaba atrás y el hambre aprieta y ahora estaba solo. Me
gustan los lujos y como pueden hacer los gays, debía salir del closet, pero eso
sí, con cierta elegancia, garbo, doubonair. No me iba a entregar así de fácil, debía
simular mi hambre y mi ambición.
Lo anterior
perfectamente; y usando palabras más, palabras menos, hubiese podido ser
escrito por cualquiera de los hermanitos Escarrá, contra quienes no tengo nada
en términos personales, pero las costuras familiares se les notan a toesas de
distancia. El muy infeliz, mofletudo, adiposo y engominado docto, acaba de argüir
algo en esos términos de universos paralelos y allí voy: “Solicitar una intervención
militar, expresa profundo desprecio a la dignidad de los venezolanos” y ahora déjenme
chequear bien esto, porque de dignidad hablamos, sobre todo en esos hermanos
Escarra y debo recordar que cuando Hermann era constituyente, en 1999, precisamente
él discutió y aprobó aquel artículo 187 numeral 11 de la constitución que se le
acomodaba.
Lo indigno
son esos movimientos “kamasutranos” de ir de aquí para allá y de allá para acá, dependiendo de si se
conviene cruzarse en el camino del universo paralelo del que hubiese sido pero
que será.
Parece todo
esto un trabalenguas cantinflero y sí; ciertamente este par, de modales
monacales, realmente lo son.
Bernardo Jurado, es el autor de "La fragancia de la rebelión" a la venta en Amazon.
Bernardo Jurado, es el autor de "La fragancia de la rebelión" a la venta en Amazon.
👏👏👏👏👏👏👏
ReplyDeleteSaludos Bernardito, ----que clase de universoso...!!!gracias a dios estoy bien lejos de ellos...contaminantes, toxicos,,se podriam definir..
ReplyDelete