SI LAS
PIEDRAS HABLARAN
En
el camino, solo las piedras observan. Algunas cual gigantes silentes, otras
como testigos fieles de los pasos.
Han
sido muchas, perdón, jamás serán muchas, las aventuras y desvaríos, que han
hecho daño y en otras ocasiones espero que sean recordados los momentos con una
sonrisa, porque fíjense bien que no recordamos personas, sino momentos, ¿se han
dado cuenta?, si, momentos con esa persona odiada o amada.
Su
inmensa cuenta bancaria solo quedará para el buen recuerdo del fisco y de los
herederos, que harán seguramente una gran fiesta silenciosa por su muerte, de
manera que siempre llegamos a la misma conclusión: toda vez que no soy muy
amado por los Dioses, por aquello que los amados por ellos, mueren jóvenes y ya
yo no lo soy, ¿realmente estoy viviendo la vida que deseo?, si no es así, amigo
lector, le tengo buenas noticias:
Usted
va a morir, sus seres queridos también lo harán y sin aviso, su vida, buena o
mala es finita, se acabará y como las aventuras prenombradas, jamás será suficiente
el tiempo para Usted, clamará seguramente por un respiro más, por una sonrisa más,
por una caricia, por un amanecer, por un trago de agua más o por ¿un amor más? Y
las piedras del camino siguen observándolo, asegurando que es usted un gran
tonto que ha desperdiciado su vida en ese trabajo aberrante que no le hará
millonario; o en ese vicio absurdo que desgasta su salud y también su bolsillo.
Me
rio y seguiré haciéndolo, porque nadie podrá pensar que un individuo serio como
yo, con un exclusivo traje y una bella corbata, sumando el prestigio que me
precede, entre al baño de damas del muy lujoso restaurant, solo para besarla. ¿Una
gran aventura, no creen?, llena de adrenalina, nos hace sentir como a unos
murcigleros poco experimentados, acelera el corazón, aumenta la impresión y la
sorpresa de ella, ¡nos hace vivir! O tal vez nos hace sentirnos los amados de
los Dioses por un momento de riesgo, de lujuria y pasión en el sitio menos
indicado, más arriesgado, en vez de ir a mi apartamento, en soledad, con el
control de la atmosfera amatoria, pero es que eso ya lo hemos hecho, ¿otra vez?,
no por favor, porque pienso en las piedras y en el que dirían si hablaran.
Soy
un experto y no exagero, un experto en degollar relaciones fastidiosas,
rutinarias y por rutinarias también absurdas, porque no voy a vivir por siempre
porque toda clase de estratagemas son lícitas, lo mismo en materia de amor, que
en la guerra más encarnizada.
Ella
está de cumpleaños hoy y su formación científica y más aún la humanística, se
funden conmigo como el beso en el baño, porque ya no nos da pena, porque
olvidamos esa palabra, porque somos amados por los Dioses, pero sobre todo por
esquivar el protervo comentario de las piedras del camino de quienes no aguantaría
sus ponzoñosos comentarios.
Hoy
está de cumpleaños mi amor Doris Alicia y ambos seguramente haremos hablar a
las piedras.
Un gran viaje!!! Feliz aniversario del inicio de su viaje alrededor del sol! Me le deseas un muy felíz cumpleaños, aunque presumo por tu escrito que ya lo es...felicidades compadre...
ReplyDelete