SE MERECEN A PINOCHET

 

SE MERECEN A PINOCHET

            Claro que se lo merecen, creo que fue un gran patriota que le puso orden a los ignorantes comunistas, pero me temo que a los chilenos les hizo falta más, corrijo, no a todos los chilenos.

            Duélale a quien le duela y con ello incluyo a mi admirada Isabel Allende, Chile es hoy en día lo que es por la gestión del General Augusto Pinochet, quien fue un dictador que le dio en buena hora un golpe al absurdo presidente comunista, Salvador Allende en 1973, pero a lo que vamos que Pinochet ha muerto y con él, buena  parte del prominente futuro.

           Los comunistas, todos sin excepción, se han dedicado por décadas a llorar y debemos reconocer que el método les ha resultado muy eficiente, toda vez que el resto del mundo les da cabida con cierta lástima o peor aún, con cierta benevolencia porque ellos también tienen derechos humanos y ponen cara de "yo no fui" hasta que se hacen del poder de tanto mendigar, saquear, robar, conspirar y allí en el poder que les han dado los pobres a quienes han jurado defender, pues se le olvidan los derechos humanos de los demás, a quienes consideran enemigos y por ende susceptibles de ser asesinados en nombre de la causa.

            Han saqueado iglesias en Chile, las han incendiado y todo en nombre de la libertad.

            Pinochet les puso orden, también hubo asesinatos que con evidencia no podemos compartir, pero díganme: ¿tuvo el sistema democrático alguna opción de actuar diferente?

            Los comunistas tienen algo interesante, realmente es una sola cosa: no descansan, trabajan y trabajan, conspiran y roban sin receso, asesinan y delinquen hasta lograr el control absoluto de los bienes que ellos no produjeron y de las almas de los incautos que les siguen y es una enfermedad mental, un virus maligno e incurable y por ello el mundo libre debe entender que el virus citado debe morir solamente con el huésped biológico.

            En Venezuela tenemos una excepcional pandemia de esta enfermedad, primero en las postrimerías de los años sesenta con la inoculación del comunismo cubano, luego a la llegada de Chávez y ahora el mofletudo Maduro, y lo lograron con años de disciplina y notable trabajo, lograron saquear hasta el futuro y la dignidad y ya el virus busca otro huésped que les permita seguir viviendo sin producir.

            El mundo libre debe dejarse de tonterías y entender que todo aquel que atente contra el sistema es susceptible de perder todo derecho y libertades, porque de lo contrario, puede llegar a ser presidente como Chávez, usando las herramientas que ellos mismo aborrecen. También pueden llegar a presidir a España a Chile, a Bolivia, Nicaragua porque Cuba ya sería mucho decir.

            Han quemado iglesias, han saqueado negocios a favor de su delincuencial causa y ya veremos cuando la ley actúe y les ponga coto, como llorarán, protestarán y reclamarán que tienen derechos, mientras el pusilánime gobierno, aterrado, hace concesiones, son permisivos y hasta amables con los delincuentes.

            Me temo que se merecen a Pinochet, pero pronto.

Bernardo Jurado es el autor de "La fragancia de la rebelión" y ocho libros más, todos a la venta en Amazon y las más prestigiosas librerías de Miami y el mundo.