Search This Blog

Thursday, May 21, 2015

CIUDAD CAÓTICA


CIUDAD CAÓTICA

                Solamente hay dos personas en el mundo que nunca vieron la serie de Batman. Uno es Evo Morales y el otro es un amigo mío que sigue siendo un amargado pero yo lo quiero mucho.
                Todos nos disfrazamos alguna vez de Batman, pero jamás de Robín. Creo que desde la inocencia de la infancia ya le veíamos muy manerado y femenino. Durante los 120 episodios de la serie de televisión, Robín repitió 347 veces diferentes versiones de ¡Santo cielo…esto o aquello!

                Robín fue un ex trapecista de circo y el villano Dos Caras había matado a toda su familia. El jóven fue adoptado informalmente por el millonario Bruce Wayne, que en la traducción en Venezuela lo llamaron Bruno Díaz, para tropicalizarlo y a manera de que fuera metabolizable por nosotros los niños de entonces y Batman (Bruno Díaz) lo llamaba el joven maravilla,  ¿dígame Usted si no suena femenino?.

                El escenario de los bandidos, las fechorías y el saqueo se llevaba a cabo en Ciudad Gótica y el comisionado,  ¡el pobre comisionado! Siempre andaba como los testículos de los canes, atrás, siempre llegaba retardado junto con la policía y las fuerzas del orden a las más violentas escenas, donde Batman y Robín ya tenían a raya a los maleantes.

                Dos damas a quienes ninguno de los dos jamás pretendió, ni siquiera una insinuación un poco lujuriosa eran: Bárbara Gordon, la batichica que estaba bien buena y que trabajaba como bibliotecaria y la otra no menos buena Celina Keyle que era el nombre de la Gatúbela.
 

                La serie se hizo famosa por sus exactas 87 onomatopeyas en las escenas de peleas y creo que vale la pena recordar algunas de ellas fueron: ¡Pow! ¡Zonk! ¡Biff! ¡Smash! ¡Clunk! ¡Crash!

                Nunca nadie supo donde quedaba la baticueva, que era esa suerte de escondite donde entraba el vehículo llamado batimovil y que para abrir el pasaje secreto Bruce Wayne colocaba las manecillas de su reloj en la hora exacta que sus padres fueron asesinados.

                La ciudad caótica en la que se ha convertido Caracas requiere y adolece de tantas cosas que no creo que Batman pueda con ella. La baticueva nunca fue descubierta porque el súper héroe estaba del lado de la ley, porque si no, no solamente la hubiesen descubierto sino que los Navy Seals la hubiesen allanado, hubiesen metido preso a Batman, al maricón de Robín, al chofer y hasta a Harriet Cooper, la simpática tía de Bruno Díaz o Bruce Wayne, ¡como quieran!
                Si yo fuera Diosdado, viviera en ciudad caótica, fuera esa suerte de Guasón malvado y burlón y estuviera bajo amenaza del Gobierno Federal de los Estados Unidos, estuviese muy mortificado porque uno que estuvo en su propia baticueva fue Saddam Hussein y ya sabemos que el sí sabía de cuevas. Otro con otro estilo no menos sigiloso y hasta resbaladizo fue Osama Bin Laden y a ambos le llegó en su momento y cuando menos lo esperaban el largo brazo de la ley norteamericana que ¡no tiene buen humor! Creo que Diosdado debe colocar las manecillas de su reloj en la hora correcta y entregarse a la justicia, antes de que por la fuerza le descubran la cueva disfrazada de legalidad donde ahora se esconde.

 

 

               

1 comment:

  1. !Wuao! Càspita! Recórcholis! Qué puedo decirte. !Magistral!

    ReplyDelete