LOS SOLDADITOS DE PLOMO

LOS SOLDADITOS DE PLOMO Ayer veía con verdadero desagrado y estupor al dictador rodeado de los Generales acusados de narcotráfico internacional, como explicaban al generalato y demás oficiales superiores las ventajas del socialismo, las ventajas de la independencia tecnológica, las ventajas del estudio histórico y los cuentos continuaban en una sinusoide inaguantable. Que cuando él era teniente en el batallón Agraz, luego que abrió los ojos y Reyes Reyes le dijo que debían planificar el golpe, ¡pero no es golpista!, es revolucionario, que no se iría de baja gratuitamente y que la democracia estaba enferma de corrupción. El pase televisivo a Maracay, Estado Aragua, en el centro del país, con un tal General Morales, quien abrió la lisonja con una frase hecha a la medida del cáncer del dictador, rodeado de verdes olivos que aplaudían las ventajas importantes del marcaje de la munición, para saber a quien mataron con ella y por ende a quien pertenecía. Trajeron de manera tan improvisada como el gobierno y sobre un camión de estacas, de esos donde se puede llevar a los puercos, un pequeño avión cuya explicación escasamente técnica fue dada por un Capitán de Fragata en nomax de vuelo y quien de acuerdo a lo dicho por el mismo, fue construido con materiales compuestos nacionales y diseñado por personal militar venezolano entrenado en Irán, país donde aun se cuelgan hasta la muerte a los homosexuales, narcotraficantes y ladrones. Mi sana recomendación a los personeros de la dictadura es que teniendo el rabo de paja que ostentan sin empaches, no deberían, por seguridad personal acercarse al fuego. Es harto conocido que el ministro chavista más recio y masculino es María Cristina Iglesias. Henry Rangel Silva está catalogado por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, como narcotraficante y lavador de dinero y de ladrones no hablemos, porque en este blog, solo escribo quinientas palabras. El otro pase televisivo fue a la misma ciudad, pero con el inefable General Cliver Alcalá Cordones, de quien dijera Cristina Fernández, es un “lindo chico”, que cumple con todas las características y tropelías descritas, mas una reciente acusación de sicariato, en la persona del exgobernador de Apure y todo en una sola persona y nos narró las construcción de las habitaciones de un batallón y los comedores y hasta los baños tienen su poceta y lavamanos…toda una intensa y desgarrada farsa, sin importancia alguna. Todo lo anterior, les ruego que lo dejen a un lado, como he hecho yo mismo, porque lo mas importante es que el desaguisado discurso gastado de quince anos, fue llevado a cabo frente a los militares Almirantes, Generales y Coroneles y ellos queriendo o no, con su sola presencia avalaron la ya gastada táctica de hacerle ver al pueblo venezolano que están de acuerdo con la dictadura. Si cumplieran la ley, no deberían estar allí, porque los militares no obedecemos a proyecto político alguno, pero mas triste que ser General en revolución es el odio que genera su falta de densidad testicular para establecer posiciones al dueño del país. Son soldaditos de plomo, porque se paran firme y realmente son unos pesados.