A SU DEBIDO
TIEMPO
Como
fue usual, en algún momento de mi vida, ya no tenía nada que perder, estábamos en
mi apartamento de soltero en Coral Gables, a altas horas de la madrugada,
tocándonos, riéndonos, medio embriagados: ¿quieres quedarte a dormir conmigo? Y
ella contestaba de manera incorrecta: “a su debido tiempo” y yo pensaba: ¡qué
tonta, que ingenua, que gafa!
El
debido momento de la vida es ahora, exactamente ya, cuando tomo el vino que me
obliga a escribir esta sentencia de vida, porque: ¿se han dado cuenta que hay
sentencias de muerte?; si, todos estamos sentenciados a la muerte, pero pocos
desean vivir la vida que merecen.
Siempre
me pregunto: ¿Cuándo es su debido tiempo?
Creo,
o mejor aún, aseguro, que es la excusa de los pusilánimes, porque en más de una
de las fiestas glamorosas de Miami, donde vivo hace más de una década, en esas
fiestas donde todos quieren tomarse la foto para salir mañana en el Nuevo
Herald o el Diario de las Américas o peor aún, en la revista HOLA, he invitado
a la dama que pretendía, a ver la luna llena en South Beach y ella, siempre
ellas, con los pruritos absurdos de su mala educación me repreguntaban: ¿así,
en vestido largo y tú en smoking?, sin entender que lo que quería era quitarles
el vestido y yo el traje.
No
existe un debido tiempo. El tiempo correcto es ahora aunque te tilden de
inmaduro, loco y con poca visión del futuro.
Hace
poco una dama me dijo: “pareces un niño” pero me lo ha dicho de manera despectiva
y yo tan solo me acordé de San Agustín y le riposté: gracias, hacía tiempo que
nadie me daba un cumplido así, ojala pueda seguir siendo un niño por siempre,
porque tienen una extrema sabiduría.
Decídelo
pronto porque tienes más pasado que futuro y esto aplica a cualquier edad.
Vive, despierta temprano con una sonrisa porque tal vez mañana no exista.
Duerme poco y trabaja solo en lo que te inspire y por favor, no tengas el mal
gusto de ser político, porque dejarás la vida pegada en el esfuerzo de que
voten por ti y te acepten como el mejor. Por mi parte, te ruego que no me
aceptes a menos que te diviertas conmigo y no esperes el debido tiempo de las
tontas que fueron a mi apartamento y perdieron una buena noche.
¿Sabes
qué?; ¿sabes realmente cuando es el debido tiempo?; ya te lo dije: es ahora
mismo, no esperes, dile que la amas y si no es así, dile que lo intentarás,
porque el amor es una decisión, como la felicidad y la paz.
No
tomes más tiempo, porque no lo hay, entiende que es él, el tiempo, el que no
podrás recuperar y lo peor que pueda pasar, es que te digan que no, de manera
que será una excepcional y elegante manera de deshacerte de la tonta y de
seguir viviendo, entendiendo que ella se perdió la aventura de vivir espacios
contigo.
saludos amigo...mi filosofia de vida que trato de trasmitir a mis cercanos......"Decídelo pronto porque tienes más pasado que futuro y esto aplica a cualquier edad. Vive, despierta temprano con una sonrisa porque tal vez mañana no exista"(sic)....cuidate...no a su debido tiempo....siempre!!!
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