MADURO BUSCANDO POKEMONES

MADURO BUSCANDO POKEMONES

            Recuerdo que en una entrevista que le hice a Eli Bravo, por allá en el 2010, nos reíamos mucho porque se determinó para cierto orgullo secreto mío, que en el planeta tierra solamente habían para ese momento dos personas que no habían visto la película Avatar, uno era Evo Morales y el otro yo. Debo aclarar que el orgullo no es por formar parte de un grupo con Evo, sino porque no creo que mi carácter se acomode a una historia de tipos azules.

            Esto no es nuevo: en mi juventud mis amigos aseguraban que yo no estaba bien de la cabeza, al negarme a participar en lo que para ellos era una suerte de encantadora fiesta de tres cuadras de largo para ver Star Wars en el cine Altamira, de manera amigo lector que podrá sacar usted la cuenta de si yo busco Pokemones, el teléfono celular lo uso estrictamente para cosas importantes y siempre veo a los ojos a las personas que me hablan, no ando contestando tonterías en el facebook mientras como en un restaurant, de paso prefiero no comer que hacerlo solo y me declaro un individuo entonces retardatario, educado y sin celular.

            El sábado fui a visitar a un cura amigo mío y entre las chanzas propias de amigos me dijo que en el estacionamiento de la bella parroquia hay un punto de pokemones y (esto lo agrego yo) los pendejos llegan hasta allí, absortos del mundo, metidos en la pantalla, perdidos de toda belleza, ignorantes de lo que ocurre rededor, ciegos ante las flores y atravesados al tráfico que muchos esperamos que los atropelle.

            “No todo lo que brilla es oro, el primer juego de realidad aumentada creado por Nantic, The Pokémon Company y Nintendo tiene algunos críticos que han pedido al presidente de la última compañía, Tatsumi Kimishina, habilitar las “Pokémons Free Zone”.

            El problema no es el free zone, el problema son los usuarios tontos. Inferimos que ante el tamaño desfalco, ante la evidente falta de talento gerencial, judicial, gubernamental, policial y militar, Nicolás Maduro Moros, (quien con cierta sorna no puedo decir que el traje blanco le queda bien, que parece una hallaca muy mal amarrada) es el jefe de los pokemones y por el resultado desastroso, todos los ministros y demás personeros se encuentran buscando y buscando para ver quien le gana a Maduro, quien sí sabe bien de donde están los pokemones, porque se lo informa el SEBIN (servicio bolivariano de inteligencia) antes que a sus subalternos. Como pueden ver, ¡Maduro no es tonto!, no señor, siempre consigue a los pokemones primero y siempre le gana a sus ministros, de manera que todos nos divertimos y esa es la causa de sus lapsus mentis cuando habla de penes y panes, de chusmas y chumos, de camarados y camaradas, es solo que está haciendo bien su trabajo, está enfocado, ganando y ganando, consiguiendo pokemones en China, Rusia siempre buscando, inclusive fue la semana pasada al cumpleaños de Fidel Castro y ¿a que no adivinan? Allí en Cuba también consiguió algunos.

            ¡Es un experto Nicolás Maduro en esto de conseguir pokemones!