LA IMPUNIDAD III
Por:
Carlos Romero
Escritor
de Jurado Grupo Editorial
Es increíble la
manera de manipular utilizando el intelecto avasallante buscando beneficios
propios y lucrarse de ello, quien ha leído mis escritos conocen mi inclinación
hacia lo diestro, sí, soy derechista por naturaleza, experiencia y convicción;
mis criticas generalmente apuntan directo quienes de una u otra forma tratan de
desvirtuar la realidad con teorías o justificaciones absurdas y por demás
desacertadas que no llevan a ninguna parte más que a un callejón oscuro sin
salida.
Cuando percibo a
cualquier individuo ejecutar comportamientos inequívocos manipulados solo por
el simple objetivo de obtener un “me gusta” o por algún político conseguir votos,
de inmediato pienso que esta persona está perdiendo el norte o que ya sus
prioridades en cuanto a compromiso con sus seguidores se desvirtuó; muchas
veces cuando se ganan batallas esas victorias no significan que has ganado la
guerra y menos cuando tienes poco tiempo en esa cruzada, personalmente siempre
discurriré que el ego es el peor enemigo del poder y que siempre uno debe
rodearse de personajes que no pretendan beneficiarte de tus errores y que no
trate de manipular tu ego para maniobrar tus decisiones solucionando cualquier
problema que además sea insertado en tu complicada agenda.
No sé realmente
que intrínsecamente ha pasado en las altas esferas del gobierno que teniendo
actualmente tantos problemas, como medios de comunicación en contra, hordas de
delincuentes tratando de sabotear todo su trabajo honesto, tiendan a estar
planificando declarar la marihuana como droga de poco riesgo en el país, esto
lo veo con tres opciones paralelas, perjudicar al ciudadano como tal, descuidar
a nuestros jóvenes abandonándolos, y que alguien se beneficie de esta jugada;
cuando llegué a esta hermosa nación podía caminar por las calles sin olores
nauseabundos a miseria y destrucción, ahora apenas me levanto ya percibo un
aroma a inmundicia y porquería, conduciendo a mi trabajo y me sobre pasan
varios vehículos destilando aquel fétido aroma sin que nadie los detenga
sabiendo que son peor que cualquier arma de fuego.
No podremos
saber qué mano es la que está detrás de todas estas jugarretas de las
negociaciones ni cuál es el objetivo final perseguido, indudablemente alguien
quiere lucrarse, pero si estoy seguro de tres cosas:
1.- Esa droga es
el primer escalón que pisa un ser humano para caer rendido a los pies de la
adicción, apenas un joven suba esa escalera no podrá bajar más sin una ayuda
calificada, este es el primer eslabón que le estaremos colocando a la cadena
que lo mantendrá en prisión por el resto de su vida.
2.- Una vez
tomada esta medida no habrá marcha atrás al infierno que se nos aproxima a
todos los que no conectamos ni conformamos la decisión unilateral que se está
planteando; tengo que recordarles que al menos en el estado de Florida en las
elecciones pasadas no se aprobó que se legalizara esta droga.
3.- Pensamos hacer
lo que quería lograr en Colombia Gustavo Petro con varios delitos; eliminar
cualquier crimen y por lógica bajaremos los índices de delincuencia; pienso que
se debe hacer es honrar por lo que la mayoría del pueblo votó, acabar con el
crimen y la anarquía, librar nuestras calles de delincuentes y mejorar las
condiciones de vida para llevar adelante a la nación, necesitamos más policías,
no creamos que omitiendo crímenes mejoraremos estadísticas delincuenciales, es
un sentir irrisorio, se trata de moral y valores, en mi libro “Valores
Alterados” lo analizo con detalle y en el libro “Destellos de Humo Blanco”
imploro luchar contra la impunidad, sería dejar impune a drogadictos, luchemos
contra LA IMPUNIDAD.
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