SEXO, AMOR
Y MUERTE
Al
encontrarse de nuevo, ya ambos estaban desnudos, ella acostada en la cama y él
le tomó el pie derecho y lo besó, luego el tobillo, la pantorrilla y el muslo,
hasta llegar al sitio deseado, donde pudo comprobar con su boca, que ella
lubricaba con fruición. Como pudo Érica le tomó por sus mejillas y le volteó
boca arriba para saborearle a todo lo largo del obelisco joven.
La
crítica literaria ha sido por decir lo menos, halagadora.
Si,
son tres de los cuatro intereses de la psiquis del humano, las que he usado en
el devenir de la novela (sexo, amor y muerte); y en el anterior párrafo, se describe entre
los límites de la prudencia, el encuentro del joven piloto alemán, con la
prostituta de la que se enamora y a quien le confiesa que tiene miedo de su
primer vuelo solo.
Me
han acusado de mezquino, porque mis lectores querían más, más historia, más
disfrute, más largo como el sexo entre ambos, pero así son las historias,
además, las casi doscientas páginas no son poca cosa.
La
muerte del joven piloto el 10 de Octubre de 1944, nos sacudió a todos, de
alguna forma, cada vez que salgo a hacer mis largas caminatas meditativas a la
orilla de la mar, sigo saboreando, sigo rumiando esta historia que me sigue
subyugando, como lo ha hecho con mis amables lectores.
Es
una historia madura, adulta, sabrosa, si entendemos que nadie sabe vivir, pero
que todos sabremos morir. Que somos almas divinas, con una corta experiencia
terrenal y en el caso del piloto, esta, tan solo duró diecinueve años.
Yo
estoy muy agradecido. Tuvimos lleno total en el evento de la presentación, la
ecotimia de mis invitados fue positiva. Sonrisas, firmas, fotos, videos de
todos aquellos que sacaron su celular para filmar el nacimiento de ese otro ángulo
de la literatura ¡que orgullo para mis colaboradores y para mí!
Vendimos
todas las obras y hoy en la madrugada, cuando una tenue lluvia me cacheteaba,
me acordé del primer vuelo de Hans, que luego se transformó en lluvia, como
preludio de la nieve danesa que le hizo perder las referencias visuales, sepultándolas
bajo la blanca alfombra.
Hoy
oré por el alma de Hans Wunderlich y todavía poseo la resaca sabrosa de la
fiesta, todavía mascullo las historias de sexo, amor y muerte que se
desarrollaron solas entre los personajes.
Escribir
novelas está lleno de ese grato sabor de lo querido, de lo cómico, de lo
trágico, de lo humano, ¡de la vida!
Bernardo Jurado, es escritor. Su más reciente novela “Volando en el
Ataúd”
de venta en Amazon y en las más prestigiosas librerías de Miami.
I'm impressed...
ReplyDeleteDidn't know about your top talented way of riding...
I'll see you this afternoon at 3:00.
Said.