LA SOMBRA DE LA LLAMA
Indefectiblemente,
tendremos que vivir, tendremos que cargar sobre nuestros hombros y también llevar
la responsabilidad y sus consecuencias de todo lo que hemos dicho y hecho.
Acabo
de leer a Martín Lon, quien expone perfectamente lo predicho durante la guerra
del Pacifico y las decisiones tomadas por el Presidente Harry Truman, cuando
ordenó lanzar la bomba atómica en Hiroshima, basado precisamente en lo dicho
por el jefe de propaganda nipón.
“Lo que pueda ser malinterpretado lo será” expone
Martín y como una oscura sombra acompañará al autor. La palabra posee tanto
peso que desde aquí, desde la distancia de los anos no podemos argüir que fue
la temible bomba atómica la que realmente mató a los cientos de miles de
personas de Hiroshima y luego Nagasaki; fue realmente la palabra ambigua y
luego malinterpretada.
Recordamos
al inefable e intragable Hugo Chávez, quien hizo papelillo lo que ahora
afirmamos y maldijo al Estado de Israel, maldijo a su propio país cuando afirmó
“socialismo, patria o muerte” una sentencia muy interesante, porque aplicó realmente
su tergiversada idea social a la patria
que él cree que es y con lentitud la muerte hizo lo suyo y se cumplió
perfectamente la maldición de que si no se aplican las dos palabras anteriores,
se prefiere la muerte y yo me pregunto: ¿Cómo porque un sistema político caduco
y mantenedor de vagos y trúhanes es tan deseado que si no se aplica, se
prefiere la muerte?
Ahora
creo que esto es un chiste, los militares se saludan con slogans inentendibles
y absurdos como su actual manera de pensar: “Chávez vive, la lucha sigue” y me
vuelvo a preguntar: ¿será que estos tipejos no están bien de la cabeza?, ¡Chávez murió! Y creo que para bien de la
humanidad, pero no es a mí a quien le toca calificar esto, simplemente desde el
puente me pregunto la lucha sigue ¿contra
quién? Una guerra permanente e imaginaria los mueve y los inspira. La primera
combatiente del Gucci y Louis Vuitton, soldados subordinados que le acompañan a
todos sus combates. El otro tonto con un programa de televisión “Con el mazo
dando” ¿dando a quién? Si todos saben que se ha robado hasta el agua potable de
cada cargo donde ha ejercido la satrapía.
Esta
suerte de orfismo que algunos respetables todavía profesan, es interesante, por
cuanto quiero recordar que Orfeo ductor de una religión griega, fue el maestro
de los encantamientos y es que parecieran que están encantados, obnubilados o
atontados.
Las
llamas no tienen sombra por aquello escrito por Bolívar: “los bienhechores de
la humanidad no nacen para ver la luz, sino para comenzar a alumbrar ellos”
El
chavismo y sus derivados protervos se mantendrán en las sombras donde todo lo
malo sucede, por el contrario la sombra del amanecer sobre las personas
honestas permiten saber que damos la espalda al este con la visión en el
futuro.
Excelente. Desde el puente los que triunfan, lo hacen porque no se caen a mentiras. Ojalá y te entiendan.
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