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Saturday, October 29, 2016

LOS CULPABLES SON LOS TAMBORES


LOS CULPABLES SON LOS TAMBORES

            Es una fiesta interesante, llena de tradición. Ocurre siempre antes de las lluvias en Venezuela, o sea en el solsticio que a la vez es el 24 de Junio. Muchos estados se convierten a las devotas fiestas de San Juan y como tal vez esto forma parte de las celebraciones negroides heredadas de la época de la Colonia Española, se baila con tambores que son muy famosos, las comparsas de LOS TAMBORES DE SAN JUAN (TSJ).

            El Estado Vargas, Miranda, Aragua y Carabobo, o sea los Estados centrales, son los mayores participantes y sus moradores toman las calles en parranda, celebrando con costumbres paganas las fiestas católicas del único santo (San Juan Bautista) que junto con el niño Jesús, se le celebra su nacimiento, ¡no es poca cosa esto!

            Creo que nadie puede determinar con exactitud cuándo comenzó esta tradición de los TSJ, ni siquiera los más acuciosos cronistas de los respectivos pueblos, es que es muy difícil, probablemente soy yo quien no sabe nada de los TSJ, seguramente debe haber en alguna Alcaldía, Municipio o Parroquia alguna referencia de los tiempos de los TSJ.

            Participaban todos, era alegre, que digo alegre, ¡alegrísima!, todos bailaban. Con el tiempo se fueron licuando esas distancias sociales y llegó la revolución y ahora todos somos iguales y los gobernadores también participan, que digo gobernadores, Chávez como presidente participaba, se le dio por fin la preeminencia correcta, el más alto nivel gubernamental, ese pueblo venido a más participa en los (TSJ) TAMBORES DE SAN JUAN. Al participar los gobernantes tomó mucho poder y se llegaron a tomar decisiones, entre tragos de cocuy, tambores, el humo de parrillas, otros más enchufados tomaban whisky, los rones de todas las marcas nacionales eran cultivo fructífero en el gusto de los participantes del TSJ y se saben el pueblo, el pueblo elegido para llevar los destinos del país, ese pueblo que jamás había tenido poder y ahora que lo tienen no la van a entregar tan fácil, no señor y por ello aquí desde la muerte de Chávez, no se discute de cambios…!que siga la fiesta de los TSJ! Por siempre.

            El TSJ ha decidido no hacer el revocatorio, porque cree que esta fiesta apenas está comenzando. Son esos borrachos a quienes se les conmina ya en el amanecer a acostarse a dormir y se niegan a gritos, porque si se van los demás se tomarán todo el licor, pero ya va a amanecer y NO, que sigan tocando los tambores del TSJ.

            En plena borrachera han ordenado que Nicolás Maduro sea venezolano, porque en Colombia no se bailan los (TSJ) y si la fiesta sigue y las leyes no le convienen correctamente, tengo información de buena fuente (esta frase es lapidaria, porque infiero que hay malas fuentes) que derogarán muy pronto la “ley de gravedad”, mientras Chávez, el precursor de la borrachera descansa en el Cuartel de la Montana (CDLM)…!aquí los culpables son los tambores!

 

 

Thursday, October 27, 2016

NADIE SALDRÁ ILESO


NADIE SALDRÁ ILESO

            Ni siquiera los que crean que ganaron saldrán sin heridas, sin modificar sus conductas, sin pensar que perdieron su tiempo, sus energías o sus vidas.

            Venezuela no será nunca más como era porque esto que ahora pasa es una consecuencia y no una causa. El odio y el resentimiento están en los tuétanos y por ende en la conducta. La desconfianza es lo normal, pero ¡alto! Yo jamás escribo citando al diablo, desesperanzando, ¡jamás!, porque he aprendido que después de la noche viene un lindo amanecer, he aprendido con el más reciente de los huracanes llamado Mathews que el día siguiente la ciudad parecía una postal, que después de la lluvia, escampa, pero todos sin excepción estamos tocados, todo venezolano está herido, eso es un hecho.

            Nadie saldrá ileso porque la reconstrucción nos hará recordar lo que perdimos. Nadie saldrá ileso porque no existe sentido de pertenencia ni confianza en un gobierno maula, por decir lo menos.

            Algunos de mis lectores ven mis fotos y las de mi familia y piensan en lo bien que estamos en el exilio, que salimos a tiempo, me comentan otros, que Dios nos ha bendecido, que ¿Qué será de los tontos que intentaron hacerme daño? Y podemos seguir escribiendo sobre lo que piensan los otros sin entender como pienso yo.

            La verdad es que tienen razón, todos sin excepción, porque este exilio me permite vivir con el nivel al menos correcto, aquí crecemos permanentemente, nos mimetizamos, nos acostumbramos y créanme que doy gracias a Dios por ello, pero alto, deténganse, porque esto no siempre fue así, esto nos lo ganamos, con mucho trabajo y disciplina y ese es otro hecho, pero no podemos negar que nuestras costumbres y conductas cambiaron a la fuerza, es como tener sexo a la fuerza, seguramente será muy sabroso las primeras veces hasta que te das cuenta de que estas obligado y nada obligado gusta.

            Le pedí a Eli Bravo que me autografiara su libro y como siempre fue muy gentil, aquí nos conocimos y trabajamos una par de veces en la televisión y escuché su charla con atención y respeto, porque es un gran escritor que les hablaba a bisoños escritores de cómo hacer el oficio  y usaba con frecuencia la palabra inspiración y llegué a la conclusión de que es esa mágica palabra la que se necesita para todo, junto a la disciplina y la valentía, pero deténganse nuevamente, porque de esta última debemos hablar: un alumno en un taller de oratoria me preguntó en cuanto al lenguaje óntico que yo nombraba: ¿profesor, para Usted que es la valentía? Y les confieso que nunca había pensado en ello, recapacité y tan solo logré atinar la diana cuando le dije: “la valentía es sobreponerse al miedo que todos sentimos, pero cuidado, porque después de ello, no serás nunca más igual” pero para los efectos de este escrito un tanto personal para mi gusto, debo decirles que la actitud de los venezolanos de la oposición que defienden la prosperidad, más la actitud de los del gobierno que defienden esa parte del excremento que les huele bien, hará indefectiblemente, que ninguno de los dos grupos salga ileso.

           

Wednesday, October 26, 2016

SHARBAT GULA


SHARBAT GULA

 Escrito especialmente para este blog

Por el Dr. Omar Escarpio

                          

      En diciembre de 1984 un fotógrafo de la revista National Geographic tomó la foto más famosa que adornaría la portada de su revista, " la chica afgana de los ojos verdes”. La foto tenía una hermosura sin igual y una crudeza horrible. Ese rostro hermoso, sucio, mirando con miedo a la cámara se convertiría en un recuerdo inolvidable para muchos de nosotros. “Era la cosa más linda que yo había visto pasar" para citar al inmortal Vinicius de Moraes. Su rostro hermoso y asustado miraba a la cámara con recelos, pues los soviéticos le habían quitado la vida a sus padres y a la edad de 12 años me imagino que la vida le causaría mucho miedo.

 


      Hoy fue arrestada en Pakistán por falsificar documentos y por entrar al país ilegalmente. Todavía su rostro tiene miedo, ya no es bella, pues el tiempo y la miseria son devastadores y acabaron con la mirada más linda que alguna vez adornó una revista.

 

       Pero la pregunta que me hago es la siguiente: ¿Por qué no fue rescatada y sacada de esa miseria una vez que se convirtió en una persona famosa?  ¿Acaso fue usada como un vaso de cartón y luego tirada a la basura del olvido?  ¿Su fama acaso solo sirvió para ponerle rostro a la barbarie soviética y su invasión?  ¿Acaso se usó como un instrumento de propaganda?

 

      La única pregunta que al final me hago es la siguiente: ¿dónde estaba la misericordia humana en el 1985? ¿Nadie pudo rescatarla? Quien sabe lo que le  espera en Pakistán. Por qué National Geographic no va regresar ni le tomará una foto ahora, la belleza desapareció pero el miedo aun  persiste.

UN LUGAR RODEADO POR AGUA


UN LUGAR RODEADO POR AGUA

            Tres días completos con sus noches, escondidos entre Cayos Dromedarios. Allí llegaban mi primo Francis y Manolo en una pequeña balandra a remos a llevarnos a escondidas los chicharrones, pan, agua y hasta hielo. Esperábamos el mejor momento.





          
Llegamos allí luego de navegar los treinta y dos kilómetros por río desde Sagua la Grande, hasta el puerto de Isabela de Sagua y ya sé que estás pensando en cómo lo hicimos, es que teníamos licencia de pesca, y por ello nos escondimos en el Cayo, porque la licencia tan solo duraba setenta y dos horas.
 
 
 

            En Isabela de Sagua habían tres ingenios: el Central Resulta, el Santa Teresa y el Corazón de Jesús y como sabes es el segundo rio más grande y navegable de toda Cuba, ¿te acuerdas que te lo conté?

            El motor era bueno y fue una adaptación que hicimos de un viejo motor Checo que estaba en pedazos en los talleres de ferrocarriles y tenía 38 caballos de fuerza, porque había ferrocarril para sacar la azúcar y lo hicimos fuerte, la roda era de un roble del monte y era una vieja patana de la época de Hemingway que estaba abandonada y la fuimos reconstruyendo en algo así como tres meses en la casa de la vieja Mary, que tenía su solar en la calle 24 de Febrero con la salida Delta, tu no conoces de que te hablo, pero algún día te llevaré.

            Hijo, Sagua fue fundada en 1812 y establecida como Municipalidad en 1842, pero con todo y eso vivíamos allí apenas 56.000 personas en 661 Km cuadrados. Era bonito, pero lo que más me gustaba era “El casino español” pero a lo que vamos: nuestro barco lo reconstruimos con unos planos del Señor Mena que era maestro carpintero y salir del río no fue problema porque yo lo conocía bien, la cosa se puso fea en el mar, porque teníamos que salir hacia las Bahamas, o sea con rumbo al Noreste, no directamente hacia Miami, porque había un radar Boca de Sagua y nos fuimos con una brújula que alguien se robó y que se la vendió a Mateo, una brújula rusa de esas que usan los soldados y con un mapa que ese si me lo robé yo, creo que del Instituto Pérez Pimentel o del SEPMI que era una escuela de preparación militar, ¡no me acuerdo!. Estoy hablándote del ano del huracán Andrews por allá en 1992 y te digo lo del huracán porque la ignorancia a veces es audaz, nosotros no teníamos ni la más peregrina idea que el huracán venía.

            Pues bien, como te dije, salimos del escondite al tercer día, ya no podíamos esperar más y nos hicimos a la mar once personas: 3 niñas, 3 mujeres y 5 hombres y yo no conocía a tu mamá, tenía más o menos tu edad ahora y ten cuidado porque la juventud también es audaz.

            Te cuento que tardamos veintiocho horas en llegar y ahora con mi amigo el Capitán pude calcular de acuerdo a la velocidad y el tiempo, que navegamos 240 millas náuticas a ocho infernales nudos de velocidad. Las olas más grandes que jamás vi me tapaban el horizonte, sobre todo lo que me impresionó era la longitud de la onda, nuestra barcaza quedaba en un hoyo profundo o estaba de repente sobre una montaña, el olor del combustible diésel con vómito nunca lo podré olvidar y aguantamos y rezaba para que aparecieran los “Hermanos al Rescate” pero no, no fue así, hasta el amanecer cuando vimos tierra, bellos edificios, parecía un puerto y lo era, estábamos a un kilómetro de Fisher Island cuando los Guardacostas americanos nos rescataron.

            Fue una mala noche por toda la buena vida, aquí hice familia, naciste tú y con suerte seré abuelo, hemos prosperado, pero ¿sabes qué? El mar se me quedo adentro.

            Por cierto hijo, nunca olvides que la palabra Sagua es un vocablo indígena de la cuarta migración de los Tainos del siglo VI de acuerdo al conocido naturalista cubano Antonio Núñez Jiménez y que traduce al español: “UN LUGAR RODEADO POR AGUA”

            Nos salvamos hijo, porque a los días llegó el Huracán catalogado como el mayor destructor de la historia, pero yo no le tuve miedo, porque el comunismo te quita tantas cosas, que hasta el miedo se queda con ellos.

Tuesday, October 25, 2016

EL BAJO MANDO MILITAR


EL BAJO MANDO MILITAR

            Creo que el General Vladimir Padrino está haciendo lo correcto. Está respetando absolutamente la Constitución, obedeciendo sobradamente el mandato constitucional, subordinado al poder civil en la persona del Ejecutivo, o sea del tonto Nicolás Maduro y gústele a quien le guste sigue siendo el Presidente y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas. Hecho este punto, no crean que hice como Riki Martín quien salió del closet después de viejo, NO, porque ahora les traigo el otro lado: el que está violando la Constitución es el ejecutivo, el judicial y el poder electoral…!una tontería! Yo no quisiera calzar las botas de Padrino, porque bien saben que entre sus atribuciones no está la de reemplazar al gobierno si acaso no le gusta su actuación…!qué paradoja!

            Mi padre insistía siempre en que no había problemas sino soluciones que aún estaban ocultas y yo coincido con él, porque desde estas letras tal vez podamos ilustrar, sugerir, galvanizar alguna.

Como oficial superior que fui créanme que allí dentro deben estar pasando cosas interesantes, de manera que allí voy.

            Las Fuerzas Armadas, (quieran o no), forman parte de la ecuación política. Una ecuación de primer grado interesantemente aplicable en este momento.

            Tenemos Fuerzas Armadas para disuadir al enemigo de que no es inteligente atacarnos y  ¿entonces a dónde vamos?

            Creo que lo primero que debemos definir es quien es el enemigo y creo que ya está claro ¿verdad Vladimir?, tú me entiendes ¡no te hagas!.

            Ahora la disuasión es igual a la intención por la capacidad y la intención es la legislatura, el parlamento, el representante más genuino de la voluntad del pueblo, podemos incluir allí a los miembros de la Cancillería, pero ahora pónganse los cinturones de seguridad: ¿a que no adivinan quien o quienes son la capacidad?

            Creo que el Alto Mando, si acaso existe, debería hablar con el bajo mando militar y enterarse de que están retardados en hacer cumplir las leyes que el ejecutivo, el judicial y el electoral violan a su gusto y manera, hace más tiempo del que Padrino pensaba en ser General y ¿Cómo se hace esto?

            Si es una ecuación de primer grado tan solo deberías despejar matemáticamente y entender que la capacidad es igual a la disuasión entre la intención. No es tan complicado Padrino, estoy tratando de no delatarte, solo lee entre líneas como dice mi amigo Ramón que me lee, interpreta mijo, trata de entender que hasta Maduro suena con que le ordenes cumplir la ley porque así tendría una excusa para darte de baja y tú la excusa de darle el golpe…en la mandíbula que hace tiempo quieres darle.

            Debería el bajo mando militar, que tienen algunas tareas por cumplir, entre las que se encuentra, no obedecer órdenes abusivas y violatorias del Código Orgánico Procesal Penal, por ejemplo.

            Yo no quisiera vestir el uniforme de Padrino esta noche, porque de no tomar ninguna acción para defender la Democracia, el golpe…en la mandíbula lo recibirá el bajo mando militar… ¿me entendieron?

 

 

Saturday, October 22, 2016

EL SARNOSO AL RASCARSE


EL SARNOSO AL RASCARSE

            Les traigo otro ángulo, les muestro que las felicidades son muchas pero que deben obedecer a la regla, que es una suerte de ley de gravedad, es obligatoria o por defecto les pasará lo que aquella frase Aristotélica que reza: “La felicidad que siente el sarnoso al rascarse”, es un ratico, es corta y por ende no es felicidad.

            Me explico mejor: Cuando nos fumamos un cigarrillo somos felices, porque el cigarro es un ansiolítico, de corto espectro pero ansiolítico al fin, nos baja la ansiedad, los nervios, las tensiones, pero solo por pocos minutos.

            Cuando aquí en Miami las personas van compulsivamente a comprar y no saben que comprar, son felices, drenan sus frustraciones teniendo, poseyendo, es algo patológicamente terrible, porque al llegar a casa con las cosas que compraron que no sabían que comprarían, pues ya, se acabó el hechizo, se diluyó la momentánea felicidad.

            Es como una fantasía sexual, cuando se les da el momento de cumplirla y duermen con las dos curvilíneas rubias de sus sueños, ya, se acabó, dejó de ser una fantasía y ahora pasa a engrosar las filas de las realidades.

            Personas me han llamado para decirme de su tristeza, depresión, angustia porque ellos tenían la ilusión que los bandidos del Gobierno aceptaran el referendo revocatorio y resulta que esa mezcla no pega, ilusión con política, por lo menos en términos personales como votante, como participante de la vida del país.

            Ahora les traigo el otro ángulo prometido para que podamos discriminar con la cabeza fría, entendamos a que nos enfrentamos y comparemos nuestras opciones (este último lo harán ustedes solos)

            Yo no voy a abundar en los billones que se han robado, en el desfalco de PDVSA, en el casi medio millón de muertos por violencia, en la escases de la comida y de cualquier cosa, no, no lo voy a hacer, porque Ustedes y también el mundo lo saben, donde si voy es a entender que ellos, no tienen otra opción que seguir apretando, porque al enemigo se le debe dar una alternativa para que pueda negociar y las personas siguen con la “ilusión” de que tratan con demócratas.

            De manera que las opciones serán sencillas: o negocian, permiten el revocatorio, el desarrollo democrático de los eventos o será usada la fuerza. De darse el primer evento, se les debe dar opciones: los que contribuyan con el desarrollo de los procesos legales les será negociada su deuda por ayudar y los que no, se enfrentaran a la ley de la manera más cruda. Como siempre digo, no tienen por qué creerme, pero traten de entenderlos: ellos, los chavistas, tienen familia y sufren de los mismos males y ya sé que está pensando en Diosdado quien no puede tomarse un café al aire libre, ¿eso les parece que es vida, que se parece a la felicidad? No mi amigo, si Usted es infeliz, tenga la plena seguridad que ellos lo son más, ni siquiera puede salir del barrio a disfrutar del botín robado.

            En materia de la opción de la fuerza, allí están los militares, a quienes les llegó la hora de decidir y de ejercer el monopolio que por ley, tienen de la violencia o engrosarán las filas de los delincuentes.

           

Friday, October 21, 2016

CONSEGUÍ LA ATLÁNTIDA


CONSEGUÍ LA ATLÁNTIDA

            El piso de madera en tablas como los auténticos decks en los Estados Unidos, pero este me gustaba más, estaba gastado por la intemperie. Una terraza encantadora y ya el sol se ponía a las espaldas. Todo parecía color dorado como son las cosas en esta Miami de mis amores y dolores.

            Los veleros fondeados al frente, donde fondearé el mío, protegido, frente al sky line de la ciudad y donde pude ver como cambiaban de dirección sus proas hacia la boca de la pequeña bahía producto del cambio de las mareas.

            Luces se difuminaban en cada uno, usando tecnología LED, que consume menos amperios de las baterías de abordo y que les permitían estar envueltos en un aura blanca encantadora que se reflejaba en la mar que a la vez por la alta presión atmosférica parecía un lago apacible y amable.

            Al entrar al bar, me di cuenta de la opulencia y la variedad de licores. Yo venía sudado de correr mis religiosas tres millas diarias, lo lógico hubiese sido pedir una cerveza, pero no, pedí un whisky con soda, porque un bar de marineros no se consigue en esta ciudad llena de glamour y lujo.

            Los comensales parecían más bien piratas del Caribe mar. Unos peludos de mal aspecto y cabellos amarillentos de tanto sal y sol, descalzos, que tenían poco tiempo en tierra, pero hablaban en ingles a baja voz, ¡unos marineros decentes!

            Un trago, un segundo y llegó el carpacho de pulpo que nunca había probado en un aceite de cilantro picantico, un tercer trago y ya el bar era mío, fish and fries y ella calamares rebosados y la felicidad era completa.

            En la Guaira de mis años de juventud, había un bar de putas con el mismo nombre, el bar Atlántida, de baja ralea, de poca laya, cuya honorabilidad nunca se encontró, pero era divertido jugar a ser marineros.

            La sencillez de la vida, nos hace vivirla y estoy empeñado en ello.

            Pregunté a la camarera: ¿Ustedes tiene hielo para mi bordo? Y sin un ápice de duda me contestó: ¡todo el que quiera Capitán!

            ¡Todos se llaman Capitanes allí y eso me enamoró!

            Conseguí la Atlántida, donde el licor es barato, la gente de mar amena, la comida excepcional y yo, este pobre mortal, descalzo como ellos, me sentí en el ambiente correcto.

            En mí ya largo caminar entre los mejores y más lujosos restaurantes, Embajadas,             recepciones glamorosas e impecables, mi gusto actual se va por lo sencillo. Aun con la ropa de ejercicio escribo esto que me complace, que me hace volver a las raíces, a la madre mar, a la chusma insurrecta del marinero que baja a tierra como el toro sale del ruedo, mientras pienso en todo un país preso por los pendejos que fueron escogidos por otros pendejos y tienen tras las rejas, sin la libertad de la mar, a la mayoría decente de un país dividido por el odio y la insidia.

            Conocí esta tarde el bar Atlántida en Key Biscaine y respiré, frente a la mar, el aire de la libertad plena.

Thursday, October 20, 2016

EL ASIENTO DE LA MALDAD


EL ASIENTO DE LA MALDAD

            Le preguntaron al muy prestigioso exorcista, el Padre Salvador Hernández: ¿y Usted realmente cree en las posesiones del Diablo?

            Era una jovencita, una periodista novata seguramente, no pasaba de los veinticinco a más dar.

            Le contestó en latín algo que seguramente escribiré mal, pero sonaba a algo como esto  “mandatus imperativo ordenes”, así es la práctica del exorcismo, un mandato y en el siglo XXI sigue existiendo. Lo explico mejor: mis lectores saben bien por mi afición en simbología antigua y los misterios de la Iglesia y hace muchos años he conseguido el nombre del demonio, el maligno, Satanás, Belcebú, Lucifer y Mefístoles tan solo 442 veces en el pentateuco bíblico, o sea, el Antiguo testamento y 412 doce veces en el Nuevo Testamento, de manera que tenemos al enemigo bien delimitado.

            Deténgase, no siga leyendo, no tiene por qué creer, respeto su punto de vista, pero el Padre Pío del que seguro ha escuchado hablar, era con frecuencia sacado de su cama y arrastrado por el maligno.

            No siga creyendo, ¡ya basta!

            Pero el Papa Juan Pablo II, ahora Santo, fue un exorcista de acuerdo a la opinión del Padre Salvador Hernández y usaba con frecuencia la oración exorcizante del Papa León XIII invocando al que más sabe, al Arcángel Miguel.

            “Toda maldad tiene su asiento” y esta frase no es mía, es de Miguel de Cervantes y Saavedra en su inmortal obra “El Quijote de la mancha”, escrita por cierto con la métrica del número Áureo, pero esa es otra materia, (si está interesado búsquelo en el internet).

            No me crea, se lo ruego.

            ¿Será que un país como Haití, dado ancestralmente a la brujería, a la superchería, al Vudú, tiene mala suerte? Porque quiero recordarles que es vecino de la pujante República Dominicana y el terremoto fue de la frontera hacia Haití. ¿Será que Cuba tiene mala suerte? Y no voy a ahondar en esa materia conocida por todos, pero ya se lo que están pensando y ahora: ¿Será que Venezuela, su montana del Sorte (Montana en el Estado Yaracuy, llena de brujos y prestidigitadores) multiplicada por diez a la tres desde la llegada de la revolución, tiene mala suerte?, no crean mis queridos lectores y vuelvo a tratar de explicarlo mejor:

            El Papa Paulo VI, le llamaba al maligno “el perverso, el pervertido y el pervertidor” y ¿yo no sé porque pienso en Hugo Chávez? Seguramente es un error mío, pero al escuchar las tres palabras siempre pienso en él.

            Al final, esta es una guerra de la luz contra las tinieblas, una guerra ancestral del bien contra el mal, la guerra del ángel caído contra el todopoderoso, pero no tienes por qué creer en esto, solamente observa y déjame saber, porque seguro estoy que “la maldad tiene su asiento” pero solo donde se le permite.

            Médicos del cuerpo y la mente entienden que hay cosas que se les escapan de las manos, son posesiones de la maldad que paradójicamente abominan los sacramentales y las cosas santas, ¿Cómo no va a ser así?

            La maldad existe, si se le brinda la silla para que se instale. ¡Ustedes me entienden perfectamente!

           

           

 

           

Tuesday, October 18, 2016

UN GRITO AL LUCERO


UN GRITO AL LUCERO

            La mente humana se va sugestionando, creando procesos neurolingüísticos que transforman la conducta, tanto, que ahora el que no se deprime está fuera de orden. Yo no recuerdo a deprimidos en mis ancestros. Probablemente lo simulaban, lo escondían, lo ocultaban, pero eran grandes actores, si ese fue el caso.

            La producción de serotonina es importante. Debemos hacer de ella una inmensa factoría de satisfacción sin caer en la ludopatía, pero ¿A dónde vamos con este escrito?

            Muchos de Ustedes han leído los libros sobre la interpretación de los sueños, sin entender porque ellos ocurren, ¿porqué de la manera en que ocurren, porque no se respeta en ellos los tiempos?, al fin, sin entender la mente.

            ¡Caso complejo este!

            Resulta que yo tuve un amigo muy cercano, una persona cómplice y a la vez el gran maestro. Su palabra, no aguantaba ningún remedo, por la solidez de la chanza y a diario sonrío sin saber porque lo hago, tan solo pensando cuando le llegó a decir a aquella novia del momento, el día que se la presenté en el Restaurant Tarzilandia en la Altamira de mi infancia lo siguiente: “Señorita, vivir con un Jurado es una aventura inigualable…!no se la pierda!

            Era mi Jefe de Relaciones Públicas o tal vez soy yo el de él, pero fuimos muy amigos, jamás he tenido una amistad así con nadie y aunque corro el riesgo severo de ser pechado por mis muchos y muy queridos amigos, les conmino a que sigan leyendo para que entiendan porque todos sin excepción están en la segunda fila.

            Éramos un par de muchachos no tan muchachos, ambos jubilados, ambos socios en aquella Caracas lúdica, ambos con el dinerillo suficiente como para que nos atendieran con la hipocresía correcta en los mejores restaurantes y donde estábamos había una fiesta, celebrábamos cualquier cosa, corrijo, la vida no es cualquier cosa, ¡celebrábamos la vida!, sin receso, sin pausas y con muchas risas.

            En una ocasión en mi casa, frente al counter de mi cocina, en el último trago de la noche ataqué con toda maldad su oceánica cultura general, era casi una ofensa, pero yo era el único que me permitía esos lujos: “¿sabes qué? He conseguido un error en tu libro, los moros subyugaron a los cristianos por menos tiempo del que dices” y cayó en la trampa: me dijo con prosopopeya: “mi libro es producto de una severa investigación y me da la feliz oportunidad de apostar contigo la cuenta del almuerzo de mañana, donde tendrás que pagar, porque yo no tengo ninguna duda de lo que he escrito”

            Heredé de él, el nombre, la carrera, la afición por la lectura, por la mar, por la escritura y por el buen gusto. Hoy sonrío pensándole, hoy estoy agradecido por haberle tenido como maestro de la vida, hoy me arrepiento de no haberle dicho más veces que lo amo, porque hoy, mi padre, el hombre más recio que jamás conocí, cumple trece largos años de haberse ido al encuentro con el arquitecto del Universo y a mí, esperando mi hora, tan solo me queda GRITAR AL LUCERO, que mi mente quiere pensar que es él.

Bernardo Jurado es el autor de "Divinos, luego humanos" y ocho libros mas, todos a la venta en Amazon y las mas prestigiosas librerias de Miami y el mundo.

Monday, October 17, 2016

155 ALMAS


155 ALMAS

            Capitán, su presión arterial está muy bien 11/8.

            Solo debemos esperar los resultados de laboratorio para aislar trazas de drogas y alcohol, le decía el Doctor mientras con la pequeña linterna examinaba la pupila, cuando llegó el oficial colega de la aerolínea US Airways para informarle que estaban todos, los ciento cincuenta y cinco pasajeros.

            Fue un vuelo de rutina. Tanto Jeff, su primer oficial, como él lo habían hecho por décadas. Pasó por el pequeño restaurant en el aeropuerto de La Guardia en New York para comprar un sándwich de pavo y siguió a su avión, donde tiempo después le dieron el “clearance to take off”, o sea autorización para despegar.

            Doscientos nudos de velocidad, dos mil ochocientos pies de altura, todo perfecto, todo tranquilo, en ascenso y con un día encantador, de esos días de Enero, fríos pero bonitos, claros, con mucha visibilidad y al levantar la vista, tan solo alcanzó a decir “pájaros” y acto seguido se escucharon las colisiones, al menos doce de ellas, fueron quince tal vez. Ambos motores se apagaron, intentaron tanto Jeff como él hacer el procedimiento de encendido y nada. Ordenó encender el APU que queda en la cola de ese tipo de avión y cuyas siglas traducen al español “Unidad de potencia auxiliar” hasta que llegó el temido momento:

            “May day, may day, may day this is flight 1549 over”, los pilotos y marinos saben de qué hablo, ¡del llamado de emergencia!.

            Con voz profesional, segura, equilibrada, el Capitán Chesley Sullenberger, piloto de la Fuerza Aérea retirado, con más de cuarenta años en el aire y quien llevó por tantos años a más de cien millones de personas, solicitó permiso para devolverse al aeropuerto. Todo sucedió en 37 largos segundos y se dio cuenta que no llegaría, preguntó por el aeropuerto alterno en New Jersey y por supuesto todos le autorizaron, pero tampoco, perdía velocidad, ya estaba a 160 nudos, lo autorizaron, mientras su mente como una computadora trabajaba la suma de los vectores, hasta que volvió a hablar con la serenidad del acero: “Procedo al Hudson”

            El río Hudson es el que atraviesa a la Capital del Mundo, New York y ese 15 de Enero, un día antes de mi cumpleaños, pero en el 2009, desayunaba cuando vi la noticia en la televisión de los Estados Unidos y tan solo pensé en el ángulo de entrada al agua y en el frío terrible de ese caudaloso paso de agua.

            El Capitán Chesley Sullenberg, su primer oficial Jeff Skiles y su tripulación de cabina, pudieron acuatizar, salvar a las ciento cincuenta y cinco almas a bordo y ni un solo pasajero tuvo un rasguño.

            Este país está preparado porque sus gentes piensan en equipo, fueron asistidos inmediatamente por capitanes de buques menores, socorrieron a todos, nadie sufrió de hipotermia y todos nos sentimos orgullosos de ellos.

            Vivir en este país en un privilegio porque en cada episodio, aprendemos del lado bueno de la naturaleza humana, del entrenamiento, del profesionalismo en la acción.

            ¡El Capitán Sullenberger, a quien llaman Capitán Sully, salvó 155 almas!

 

 

           

Sunday, October 16, 2016

HAY COSAS QUE NO SE


HAY COSAS QUE NO SE

            En la frontera norte de los años setenta, había leído aquella interesante obra de Irwin Wallace titulada EL PREMIO NOBEL. La había conseguido en la inmensa biblioteca de mi padre, que fue una cantera de conocimientos llenos de una tranquila sabiduría.

            Mamá nunca se explicó porque a esa edad me gustaban las damas mayores que yo, pero no era una cuestión de edad sino de nivel de conversación. Al graduarme con veintiún anos, mi novia tenia treinta y cinco, era sumamente preparada y el sexo se transformaba en una encantadora clase de lenguaje epistemológico, todo era mágico, trascendental, encantador.

            Tengo amigos personales y otros que no, que calificarían sobradamente, por su obra y por su blindado prestigio literario al Premio Nobel de literatura instituido a finales de 1800 por el filántropo sueco, como herencia imperecedera a la humanidad. Carlos Alberto Montaner de Miami, Leonardo Padura de Cuba, Diana Chiaviato, la misma Isabel Allende de Chile, Ustedes los conocen y manosean su obra. En Venezuela Leonardo Padrón, Rodolfo Izaguirre, también su hijo Boris, me atrevería a agregar a mi amigo Jaime Bayly y sus novelas truculentas, pero ¿Bob Dylan?

            Definitivamente estoy equivocado, hay cosas que están muy ocultas de la vida del novel premio Nobel, yo no lo consigo, necesito ayuda, alguien que me ilustre, que me alumbre el conocimiento, porque seguro estoy que en materia de literatura de habla inglesa le prenombrada lista se multiplicaría por tres al menos.

            Cuando comparamos obras como la de Camilo José Cela con la de Bob Dylan, no puedo menos que pensar en el cuento de la caperucita roja y en cómo han cambiado los gustos, tal vez las influencias, el sistema de escogencia y votación en la entrega del premio más reputado del conocimiento humano.

            Lo lamento pero insisto que hay aquí algo oculto, que debe ser muy importante, debe ser tan brillante que debe encontrarse bajo siete llaves oculto en una fortificada caja de un banco del tesoro.

            Probablemente las cosas han cambiado y yo no, tengo que hacerlo, tengo que abrir mi mente y mis gustos y seguramente mi hijo tenga razón cuando me acusa de anticuado, de manera que considero que en términos latinoamericanos califica perfectamente para el año que viene Ricardo Arjona y los importantes mensajes de sus canciones en ¿“La historia del taxi”?, ¿”Señora de las cuatro décadas”? o en ¿”Si el Norte fuera el Sur”?

            No soy el único que piensa de esta manera, basado en la ignorancia de la obra de Dylan, hay otros como yo que han puesto en las redes sociales con justa razón que también el dominicano Juan Luis Guerra lo merece, pero en química, por haber hecho que “lloviera café en el campo”

            Este cuento ha cambiado mucho y hay cosas que seguramente yo no sé.

           

Saturday, October 15, 2016

Y TE PEGO EN LA “S”


Y TE PEGO EN LA “S”


            Bien lo decía Francisco Herrera Luque en su encantadora obra “La huella perenne”.

            Miami se ha llenado de eso, tenemos que vivir indefectiblemente con ese defecto, es genético, incrustado a sangre y fuego en el ADN, desde creo que la tercera oleada de los Caribes, Taínos ¿Qué se yo? Pero persiste aun y después de tanto tiempo como una mancha, como una nube negra que se cierne con su lluvia, con su tormenta, con su baja presión.

            Herrera Luque, asegura en su obra, que leí hace un par de décadas, que poseemos una huella heredada que nos persigue y que obliga nuestra conducta, me refiero específicamente a los venezolanos y a los cubanos.

            Se los explico mejor: en aquella reunión de cazadores, uno de ellos fue conminado a contar de nuevo cuando aquel león en el África, herido ya como estaba, se escondió detrás del mogote y al él aproximarse le saltó encima, perdió con el golpe su arma y tan solo acudió a morderle en su espesa cabellera, allí, casi detrás del cuello y en eso el camarero le pregunto: ¿le sirvo otro trago Doctor?

            Al entrar de nuevo a conversación, el valiente cazador había perdido la hilación de la historia y como es de esperar preguntó a sus escuchas: ¿en dónde me quedé? Y al unísono dijeron, en que ¡tenías los pelos en la boca! A lo que él con verdaderos signos de admiración dijo ¡si ciertamente, que clase de hembra era esa!

            La huella perenne de acuerdo a Herrera la llevamos todos y está constituida por una triada explosiva…allí voy: “la habladera de tonterías del español, la flojera del indio y la sumisión del negro” ¿Qué les parece?

            Ayer me reuní con un socio en el bar. La idea era ponernos al día y tomarnos un par de tragos luego de una agresiva semana. Como siempre llegamos a las seis de la tarde y el bar estaba sin mucha gente, como a mí me gusta y Mario el barman, me sirvió un vasodilatador con hielo y soda. Saludamos a los amigos consuetudinarios, conversamos sobre el tiempo que no nos veíamos y llegaron esos tres. Eran venezolanos, altaneros, escandalosos. Mi socio, un colombiano educado y amable se sintió inmediatamente incómodo. Había una suerte de agresividad muy caraqueña en ellos.

            Pidieron a viva voz sus tragos y el bar los miraba expectantes, en silencio, cortaron toda amabilidad, mientras seguían informándonos de sus super-aventuras en paracaídas, en el golf, en el sky acuático frente a Key Biscaine y no podía faltar el buceo, la pesca submarina en los cayos, donde el valiente compatriota nadaba con los tiburones y como si de algo normal se tratara, las aletas le golpeaban de lo cerca que los escualos le pasaban, hasta que yo le interrumpí cansado de escuchar tanta mierda: ¿y las aletas te pegaron en la “S”? y el compatriota me preguntó: no entiendo lo de la “S”

            No pude menos que responderle y cortar la ecotimia negativa del tonto echón. ¡EN LA “S” DE SUPERMAN!

Wednesday, October 12, 2016

El MÁGICO RITUAL


El MÁGICO RITUAL

            Llegó El maestro, el decano de mis tiempos de estudiante en la Escuela Superior de Guerra Naval.

            Los tiempos han cambiado, ya pasó Septiembre once y su terrible desgracia y herencia de terror y miedo y él quiso conocer la calle del pecado, donde yo pululaba como si fuera un gánster, dueño de varios locales de inferior categoría.

            Nos hospedamos a dos cuadras de Bourbon Street, para no tener que manejar y fuimos, no sin antes pasar por el bar donde nos tomaríamos un par de hurricanes, si, en el bar de Pat O’Brien, un Irlandés de relajada conducta.

Pues bien nos fuimos al sitio, famoso y feo, bajamos las escaleras y olía a putas, se llama “The House of blues”….! Que gran sitio! No por el olor sino porque allí podía conseguir el mejor jazz de la ciudad, ¡esa gran ciudad!, se me metió en los tuétanos y me detenía a ver a los ancianos bailar el tap y llegué a poner propinas de $50 por que lo valían, eran unos profesionales.

Allí he bailado sin seguir la música, ¿Qué importa? Es que no entienden que ¿estamos de farra?

Los mejores grupos de jazz de New Orleans, ¡la bella ciudad de la cual sigo enamorado!

Se parece a mí, nadie le hace caso a nadie y recuerdo aquella foto al amanecer con un vaso de bourbon en la mano, recostado a una patrulla de la policía  de la ciudad, amanecido, desbordante de alegría y con el maestro al lado, ¡qué gran foto! Fue en el French Quarter y la carreta a caballos que me llevó estaba a un lado con el carretillero un poco adormitado, insisto: ¿Qué importa? ¡Era un mágico ritual!

Oswaldo, mi maestro no sabía porque la rubia voluptuosa bailaba para él, nunca supo que le pagué $20 para que lo hiciera, pero le hubiese pagado más por su cara de alegría, todo era alborozo, todo era bonito, hasta la ilusión.

New Orleans posee esa dicotomía extraña entre lo moderno y lo antiguo, creo que ninguna ciudad de la unión americana la tiene, ni Washington, tampoco Norfolk y su bahía de Chesapeake, Chicago y sus vientos, San Diego en California, ni la misma Miami y sus diferencias, si, mis amigos fueron  y es un mágico ritual y no exagero.

Como lo pasado está, la recuerdo como un viejo amor y ahora escucho en el sofisticado y extravagante equipo de sonido de casa, cuyas cornetas suenan en direcciones diferentes a donde yo quisiera, suenan difuminadamente ese antiguo jazz de mis mocedades que fue inventado en 1900, si, a principios del siglo pasado y que era la música de la chusma, era el reguetón indeseable de ahora, hasta que Ella Fitzgerald lo adaptó a la sociedad.

Que de recuerdos, que de anécdotas, que sabrosura la de la bohemia que de alguna forma me ha hecho quien soy, donde cuento a raudales mis defectos y que mis amigos se encargan de exponenciar e inventarme virtudes.

¿Saben qué?; la vida se compone de rituales mágicos y solo falta que sean Ustedes quienes consigan al mago.