EL FACTOR HERMOSURA
Creo
que nació para escribir o seguramente vivió para vivir, porque un escritor
siempre tiene dos vidas, una normal y silvestre, tal vez pedestre, otra llena
de vida y de otra visión del cosmos y el tiempo.
Para
ser escritor se debe forjar la otra cara, la otra vida y el otro ángulo que
permita inventar primero en la mente y luego en el código.
Compré
“El Aleph” de Jorge Luis Borges y desde las primeras letras, influenciado por
supuesto por su prestigio, escruté los mensajes, busqué en cada nueva palabra
de maestría infinita, el cifrado del pensamiento.
En
Borges coincide ese sueño guiado por el que nos lleva de la mano en cada
cuento, en cada muerte, en cada vida, en cada cosa que les sucede a sus
personajes, pero lleno del factor hermosura que pocos pueden lograr.
Escribió
para él, no tengo dudas y con él sus lectores se sumergen en las aguas
profundas del buen lenguaje. Me encantan los libros entre los que descubro nuevas
palabras que cada vez son menos y este escritor con su maestría en el arte de
la tinta y el papel nos engaña a todos permitiéndonos ver las cosas desde la escases
de cada cual.
No
crean que he cambiado mi estilo en este blog, no. Lo que ocurre es que todos
nos influenciamos holísticamente con cada escritor que manoseamos y al final el
resultado es ese collage de influencias que terriblemente forjan el estilo que
no siempre coincide con lo que deseamos.
Son
diecisiete cuentos encantadores para mi gusto y desde el comienzo estaba
convencido que averiguaría que es un Aleph y bebiendo desde la fuente el agua
negra del Esepo, como los ricos teucros de Zelea, me fui adentrando a las
profundidades del pensamiento de Borges.
El
Aleph es una interesante palabra que implica muchas cosas: es la primera letra
del alfabeto hebreo y quiero recordar que el antiguo testamento se escribió en
esa lengua porque era la más común para el momento, sobre el Arameo que hablaba
Jesús Cristo, pero Aleph también es el número uno y en la cultura judaica, en la Kabala implica
el inicio del universo. También Aleph es la primera letra del alfabeto arábigo,
fenicio, arameo y sirio, en fin es la primera letra del alfabeto pérsico, pero también
posee otras connotaciones: en matemáticas los números Aleph representan y
denotan la cardinalidad y la infinitud de las cosas y la obra se llena del
factor belleza y hermosura en la cita del poeta “Daneri” (Dante y Alighieri)
autor de la divina comedia.
¿Qué cosas la de este genio que todo lo mezcla
y lo embadurna del terror, amor, muerte, vida, poesía?
Jorge
Luis Borges me inspira y creo que me influencia. Sus cuentos llenos del
misterio del desierto y las vidas nómadas, con inigualable capacidad sugestiva,
los jeroglíficos, el azar, la nada, las especulaciones metafísicas sobre un
Dios y un tigre, monedas mágicas, los amores ingenuos y lascivos, en fin, es la
inserción desfachatada del FACTOR HERMOSURA.
hermoso relato. estas impregnado de Borges
ReplyDeleteExcelente!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
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