!YO SOY REVOLUCIONARIO Y ESTOY CON MI PRESIDENTE!

!YO SOY REVOLUCIONARIO Y ESTOY CON MI PRESIDENTE!

Ya es un "lugar común" oír esta expresión de boca de las personas que por una u otra causa manifiestan algún malestar ya sea cuando trancan alguna via pública por los maltratos recibidos en algún refugio para damnificados, o cuando algún trabajador a las puertas de una de las Empresas Básicas de Guayana pidiendo reinvindicaciones salariales. O cuando la viejita a las puertas del Seguro Social reclama su bien ganada pensión de vejez, o, peor aún de boca de una madre cuando a las puertas de la morgue de Bello Monte llora desconsolada la muerte del hijo que acaban de asesinar.

¿ Cómo sera posible que ante tanta impotencia todavía se tenga el "valor" de emitir tan virulenta expresión? Voy a reconocer mi atrevimiento en analizar lo que considero es un fenómeno social, y estas, las ciencias sociales no me atraen para nada por ser ciencias inexactas que basan sus enunciados en teorías y como tales, no son comprobables. Prefiero las ciencias exactas donde 2 + 2 = 4 pase lo que pase. (Mi bien recordado Almirante Félix Garcia Zambrano acostumbraba a decirnos: " 2 + 2 es igual a cuatro y un poquito mas., expresión que entendíamos con meridiana claridad).

Para explicar el fenómeno me voy a remontar al año 1973 en la Ciudad de Estocolmo, Suecia, donde una foto de un hombre y una mujer besándose conmovio al mundo. Fue tomada durante una liberación de rehenes en un banco y tuvo como protagonistas a Kristin y Olafson, secuestrada y secuestrador respectivamente. Tiempo despues esta se divorciaría para unirse definitamente a su ex-captor. A partir de este hecho, se bautizo como "Síndrome de Estocolmo" a los extraños y paradójicos lazos de afecto e identificación que establecen victimas y victimarios.

A nivel psicológico los especialistas lo explican coma "una estrategia inconsciente de supervivencia que se da en casos de extrema indefensión". Las guerras, dictaduras y grandes genocidios son, quizás, las situaciones limites que mejor dibujan esta definición del termino. Según la Licenciada Bo de Besozzi, "en estos casos el ser humano llega a adaptarse a cualquier circunstancia en pos de preservar la vida. Ya no están en juego los valores o la ética, sino el instinto de supervivencia". La víctima del secuestro desarrolla una relación de complicidad con su secuestrador llegando inclusive, a ayudar a este a alcanzar sus fines y evadir a la justicia.El secuestrado empieza a tener sentimientos de identificación, se simpatía y de agrado por su secuestrador.

Que podriamos decir de quien ha secuestrado todos los Poderes del Estado, todas sus Instituciones. De quien nos mantiene en una guerra permanente (contra el Imperio Mesmo), nos desgobierna dictatorialmente a través de un militarismo totalitario ( algunos lo definen como totalitarismo militar), ha cometido el mas brutal de los genocidios (Lista Tascon, petroleros. etc.)

Que decir de quien tiene en un constante chantaje a la población desprovista de recursos al alimentarle sus esperanzas con promesas que sabe no podra cumplir haciendoles creer que solo el hara el milagro de darles cobijo y pan.

Cada vez que escuchen a algún desvalido pronunciar: !Soy revolucionario y estoy con mi Presidente!, no sientan làstima por èl o por ella. Son personas a quienes les han secuestrado sus sueños y esperanzas. Mas bien pensemos como ayudarles para que un dia no muy lejano puedan decir como dijo aquella muchacha desconocida en carta escrita a su violador:
"Me congratula saber que no tuve que esperar a que murieras para salir de tu prision. Aunque tarde años, pude escalar el escarpado pozo donde me tenias y reconstruir los pedazos de mi vida, y ahora con el rostro en alto y la mirada clara, he logrado escribirte esta carta y enviartela a la prisión donde se que pasarás unos largos años por haber sido, aun con mi consentimiento, mi agresor".

Víctor Ponte Mendez
Capitán de Navío