ME GANÉ, UNA
BOTELLA DE WHISKY
Llegué
con mi inmenso buque de guerra aquella tarde a Carúpano, un puerto en el
oriente de Venezuela y entregamos a la Infantería de Marina, los casi 1000
hombres que esperaban, como si se tratara de sus propios hijos. Al anochecer
invité al oficial ejecutivo a hacer un recorrido por la ciudad y frente a la
plaza pude ver un bar de nombre Zanzíbar que estaba absolutamente vacío y
ordené un par de tragos que me hicieran sentirme en la civilización después de
casi un mes de mar.
Camarero:
¿sabe Usted de donde salió este nombre Zanzíbar? No lo sé Señor, pero déjeme preguntarle
al dueño que está atrás. El tal dueño, individuo de fenotipia arábiga, se
presentó para excusarse por cuanto él era el tercer dueño que había heredado el
nombre y le pedí papel y lápiz para explicarle que en Tanzania, al este del
cono Africano está un puerto de mar de nombre Zanzíbar, que es famoso por dos
razones, la primera es porque frente a él se forman las bajas presiones que por
el efecto de Coriolis pasan por debajo del cono y llegan con suerte al Golfo de
México y la Florida y la segunda es que en esas tierras nació el famoso
cantante Freddie Mercury, fallecido hace algunos años de una penosa enfermedad.
El
silencio se hizo presente y la cara del dueño árabe era un poema de confusiones.
Disculpe
Señor: ¿Quién es Usted? ¿Me puede explicar que es eso de Coriolis y quien es
Mercury?
Yo,
tratando de hacerme el gracioso le dije: le recuerdo que toda consulta genera
honorarios y el amable árabe ordenó ipsofacto una botella de whisky por su
cuenta y mandé a llamar a mis oficiales quienes aparecieron como Batman al
lanzarse del batitubo e hicimos una gran fiesta de explicaciones técnico-físicas
sobre los misterios del mar y ellos, los mas jóvenes con todo éxito se lucían
abundando en cosas que el dueño del bar no entendía pero que le impresionaban y
allí salieron las Islas y archipiélagos del sur este del África y las mareas
del Indico con respecto al Atlántico, la diferencia entre mar y océano, la batimetría,
geofísica, corrientes y efecto de Bernoulli y ya he hablado de los hijos de los
Infantes de Marina, pero escuchando a esos muchachos a los que pudimos influir
solapadamente, me di cuenta del orgullo que me producían las explicaciones que
obligaron mi silencio, para que ellos fueran los protagonistas y al marcharnos
agradecidos pudimos concluir que el saber siempre produce dividendos, buenos y
gratos ratos y el agradecimiento de quienes aprenden. Esa noche me gané ¡una
botella de Whisky!
Te espero con una buena botella de whisky, para que me expliques todo eso de: las Islas y archipiélagos del sur este del África y las mareas del Indico con respecto al Atlántico, la diferencia entre mar y océano, la batimetría, geofísica, corrientes y efecto de Bernoulli. Creo que podemos prescindir de 1000 infantes de marina. la invitación está hecha :-)
ReplyDeletejajaja con todo gusto mi querido amigo....abrazos
ReplyDeleteExcelente!!!!!!!!!!!!!!!!
ReplyDeleteDe los Marines (IM) no podrás prescindir, y cuando el Señor de las tempestades que nos ayudará a capear la que estamos atravesando, prometo que de esa tierra caliente, traeré como ofrenda una botella del licor que consumimos en la oportunidad de que compartimos en el Golfo de Paria a bordo de tu patrullera. Mis nostálgicos saludos, Compadre...
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