LA MAGIA DEL 3 Y LA IGLESIA
Anoche
aparecieron los tres Reyes Magos en mi televisor. Una historia de lo más bonita
que antes de verla, la había leído en mi infancia y me temo que por influencia
de mi educación católica con los padres pasionistas en el colegio Santa Gema en
Santa Eduviges, Caracas.
En
los diálogos entre Melchor y Gaspar, había un Baltazar de ecotimia muy positiva.
Lo que hizo el guionista fue humanizar un poco a los Reyes Magos, los trajo a
la comprensión actual y allí me di cuenta que no les conocía muy bien, eran
solo una referencia inexplicable: ¿Por qué magos?, ¿de cuándo a acá los magos también
son reyes?, ¿qué tan lejos estaban de su destino a ver al hijo de Dios? Y así,
en ese tenor mis preguntas en silencio, me atacaban y estiré el brazo en mi
mesa de noche y opté por mi biblia para conseguir en Mateo 2, lo siguiente: ‘’Llegaron
por entonces a Jerusalén unos sabios del oriente que se dedicaban al estudio de
las estrellas y preguntaron: ¿Dónde esta el rey de los judíos que ha nacido?’’,
luego viene la historia de Herodes en la que no vamos a entrar, pero ¿se dieron
cuenta que en Mateo, la referencia por antonomasia de esta historia no comentan
que fueron tres y que eran magos?
Debo
recordar que es esto una fábula y una parábola también, de forma que la palabra
mágica para entender e interpretar los textos bíblicos es la Hermenéutica, que
depende de los sabios de la iglesia católica, la única y la primera iglesia de
Cristo Jesús, los demás son copias adaptadas a los gustos de los regentes que
se hacen llamar pastores y hasta profetas y que a todas luces poseen más
lagunas teológicas que yo, que ya es mucho decir, sino refiéranse a YouTube y
busquen al padre Toro para que se diviertan como ese santo varón desenmascara a
los hermanos desviados de la fe, como él los llama.
Son
tres las virtudes teologales, son tres las divinas personas, son tres
supuestamente los Reyes Magos, en hebreo, idioma con el que fue escrito el Antiguo Testamento significa ‘’Divina plenitud y perfección’’, en la iglesia se
ha conseguido este significado: ‘’ Así, el 3 demuestra
combinación en el sentido de unidad, como en la Trinidad: Padre, Hijo y
Espíritu Santo y por lo tanto es un número especial que simboliza la Divina
Perfección’’.
En fin, en estos tiempos de
absurda aceptación de irregularidades, donde un hombre católico, creyente pero
divorciado y vuelto a casar como yo, está excomulgado, el Papa Francisco ordena
y acepta, la bendición de parejas homosexuales a todas luces, contra natura.
Debo aclarar que el homosexualismo siempre ha existido y que ahora están desatados,
no obstante, el hecho de que muchos lo practiquen no significa que está bien.
Ya
saben qué pienso y me temo que ha empezado otro sisma en la Santa Iglesia, que
desean popularizar para tener mayor aceptación en estos tiempos de poca fe.
www.juradogrupoeditorial.com
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