MUERO POR MARRUECOS
Hicimos
ese crucero de placer por el mediterráneo, también pasamos rasantemente, por
las islas griegas, nos gustan mucho esos viajes exóticos, las Islas Canarias
frente al Sahara occidental, forman parte del mismo conjunto geológico, aunque
son volcánicas, pero Marruecos ah! Marruecos, ¡moriría por ir a Marruecos!,
conocer Agadir, esa población apartada de la modernidad, con personas que
visten turbantes, vaporosas ropas que mitigan el calor, los beduinos que todavía
pululan por sus calles polvorientas, las especies, esos olores que me inspiran,
en fin chica, le decía una a las tres, a mi, esos parajes llenos de misterio me
emocionan, yo ¡moriría por ir al Marrakesh!, conocer esa mixtura entre lo francés
y lo británico, con la cultura desértica.
Yo estaba
desayunando en el Atelier Monier en la mesa de al lado, no podía evitar
escucharlas y tan solo me preguntaba, trasnochado de la fiesta de ayer, ¿qué
tipo de marihuana fumará esta señora?, después de aquello de los olores de las
especies, con los sudorosos individuos bajo las capas de tela y el infame
calor, más la escases de agua que de manera natural y ancestral existe en el área,
no me quiero imaginar la insalubre experiencia por la que la parejera comensal
desea morir. Marruecos no obstante es pujante, igual que Agadir, pero ella imagina lo contrario.
Yo sé que es
una manera de expresar lo que tanto anhela, pero me resulta exagerada, porque
he decidido siempre respetar el poder de la palabra, no apartemos la
posibilidad de la jugarreta de la providencia y una vez en Marruecos, morirá y
la familia tendrá la bella y excitante experiencia de traer el cadáver desde el
desierto que no entiende de servicios.
Estamos
rodeados, créanme que lo estamos porque ya presenté uno de los ángulos, pero
ahora voy con el otro: El Alcalde del Municipio Diego Ibarra en el Estado
Carabobo de nombre Miguel Ruiz, declara que así el Presidente Obama diga como
la tonta de Marruecos que moriría si se le diera el sueño de ir al precitado
Municipio, no podrá, porque el Señor Alcalde, lo ha declarado “persona non
grata”, así patalee, llore, mueva sus tentáculos diplomáticos, sus infinitas
influencias y todo su poder, no podrá oler las especies del Municipio Diego
Ibarra, que debe ahora mismo, ser una especie de Agadir, pero donde se habla
golpeado, con calles polvorientas, desérticas, donde los bandidos caminan
pistola en mano en medio de la también escases de agua, donde también hay
beduinos, claro que los hay, y a montones y saben porque? Porque la palabra
beduino traduce al español “SIN”, sin nada, solo lo que llevan, sin harina pan,
sin agua por supuesto, sin comida, pero también sin camellos, de manera que
estos beduinos de Diego Ibarra están aún más jodidos.
Hay algo en común
entre la glamorosa Señora de la cafetería y el revolucionario alcalde carabobeño,
ambos son sumamente ignorantes, son también
arrogantes, creo que escasos y suponen una suerte de importancia suprema por la
geografía del cuarto mundo. Esperemos desde la buena fe que le sea cumplido su
deseo y muera cuando conozca Marruecos, pero de no ser así, está invitada al
Municipio Diego Ibarra.
Excelente!!!!!!!!
ReplyDeleteMe encanto tu narracion .!!!!
ReplyDeleteDiría al mejor estilo cubano. Cosa mas buena. Excelente amigo.
ReplyDeletebien invitada està la moribunda.....a dicho municipio....o màs generalmente al paìs, total es la misma vaina en todos lados porque la inseguridad reina independientemente del la tendencia de la autoridad local, Muy bien logarda analogia, saludos y cuidate JR, WE `LL BE IN TOUCH...
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