SEXO EN ABRIL

 

SEXO EN ABRIL

            La evidencia aplastante, nos indica una explosión de la libido en el mes de abril, no solo en esta que ha pasado y en el que viene, sino históricamente en todos los abriles.

          

  Nuestros abuelos, padres y nosotros mismos nos vemos envueltos en una indetenible pulsión sexual, inaguantable, desbordante y explosiva en cada mes de abril. Yo mismo fui concebido en un abril candente, que ruborizaría a mis padres, pero yo no estaba allí, fue esa, seguramente una noche de copas, una noche loca, como la canción de María Conchita Alonso, porque nací en enero, pero les digo a todos ustedes, productos vivientes de esos encuentros sexuales, tengo más de una semana asistiendo a las fiestas de esos niños que nacieron en enero y aun este mes no termina.

            Mi padre nació en enero, mi abuela materna también, yo mismo, Saul Schwartz el 12, la hija de nuestro escritor Héctor Avilán, autor brillante de la obra ‘’El libro de los eternos’’, pero siguen las noticias, porque él mismo ha nacido el 13 de enero, ayer mi colega y maestro Contralmirante Gonzalo Acosta. Asistimos a la cena del Capitán US Army, Arturo Sánchez quien cumplió ochenta y siete años, de forma que estos intercambios de fluidos en abriles son de vieja data y los niños nacidos en enero pareciera que también, porque yo nací el 16, y mi mamá no recuerda ni el sitio, ni el motel, tampoco si fue en casa, en Puerto Cabello o Madrid, de forma que fue un encuentro casual, desprovisto de planificación y sin mucho que recordar.

            Mañana 19 de enero cumple años otro de los niños de abril, el Vicealmirante y también escritor de este grupo editorial, nuestro amigo Julio Chacón Hernández y yo no sé si felicitarlo o mandarle este escrito que seguramente lo desmoralizará, porque él también ha sido producto evidente de la pulsión y el sexo en abril. Es un mes candente este, lleno de la fogosidad y lubricaciones impensables, donde las damas exponencian sus habilidades receptoras y los hombres no pueden controlar sus capacidades seductoras, es el mes del apareamiento y del sostenimiento de la especie humana, sí, el sexo en abril, pareciera, de acuerdo con las teorías de Darwin, que es el mes de la polinización y de la fertilización que ha dado a tantos bebés, unos buenos y otros mejores, en los meses de enero.

            Ante esta evidencia, yo mismo guardaré algunas fuerzas para aprovecharlas en el próximo mes de abril.

            Feliz cumpleaños a todos aquellos espermatozoides fecundados que han nacido en enero.

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