UNA COMISION A DISNEY WORLD

En el meeting, Nicolás Maduro bajo el sol, hablaba con su cara de bobo e Izarra le pide la palabra, Nicolás se aparta no sin antes decir que el Ministro de turismo, como siempre trae sorpresas interesantes y oportunidad para el bienestar de todo el pueblo. Izarra: “Camaradas….con Chávez y Maduro (en tono grandilocuente), con la revolución y el socialismo, con la constitución y el bienestar que hemos forjado en estos últimos quince años de prestigio económico que ha demostrado a los Estados Unidos que su sistema carece de corazón y humanidad, quiero decirles que les traigo una sorpresa, donde solo el escogido podrá demostrar su verdadera pasión revolucionaria, patriótica y bolivariana… ¡aplausos!” La revolución, como bien lo dice el Señor Gobernador del Estado Zulia el Teniente Coronel Arias Cárdenas, se lleva en las venas… ¡aplausos! El legado de nuestro Comandante, ha sido marcado en la piel de cada uno de nosotros a sangre y fuegoooooo…. ¡aplausos! En esta mano tengo la misión…una importante misión…son dos tickets de avión con destino a los Estados Unidos, porque nada hay mejor que ver verdaderamente al enemigo y tenerle bien cerca para atacarle en el momento correcto...(todos guardan silencio. Nicolás, mira al cubano que le asesora y el cubano se hace el loco y voltea la cara. Izarra no se explica porque ahora no aplauden y continúa con reservas). Mandaremos con todos los gastos pagos, pero con la mesura de un revolucionario socialista a dos de Ustedes, preferiblemente un matrimonio, a Disney World, si, al corazón de la diversión absurda gringa y odiada, a la meca de la estupidez de un ratón pendejo a quienes todos adoran como un absurdo Dios, en ese país volteado por el dinero. Nicolás al cubano, en baja voz: “nos jodimos” Sabemos bien que será un sacrificio, pero nada mejor, que vengan y nos lo cuenten en el próximo y apropiado discurso de nuestro Presidente Nicolás Madurooo…-y nadie aplaudió-. La gente de repente comienza a gritar…yo, yo, yo, levantando como de costumbre la mano izquierda como su pensamiento. La seguridad no pudo contener la avalancha de patriotas y se desbordó. Todos gritaban, todos dispuestos a hospedarse en un estúpido hotel del odiado Disney, con agua y luz, servicios, alfombras esponjosas y limpias. Tontos sonrientes con camisas hawaianas y lentes ray ban, sombreros y cámaras fotográficas. En el corazón de cada individuo revolucionario, izquierdista, comunista y populista, existe una secreta admiración por los Estados Unidos. Todos desean un blue jean Levi’s, zapatos New Balance o cualquier prenda que los identifique como miliguales de un país próspero e inalcanzable. Igualmente en la mente de un xenófobo hay oculto un homosexual, igual le pasa a un racista, con su pasado seguramente negro o judío, de manera, mis queridos lectores de mis fábulas, que no se puede crear prosperidad desalentando a la iniciativa privada. El Gobierno no podrá resolver sus problemas mientras gaste mas de lo que gana y no podrán promover la fraternidad incitando al odio de las clases. Y Nicolás siguió con su cara de bobo, ¡expectante y paralizado!