El
venezolano añora el poder, le seduce, quiere estar en la foto, siempre
protagonizando o al lado del protagonista. Hay un decir para referirse a una
persona emprendedora, trabajadora y sin darse cuenta es una suerte de
sentencia: “ella es una mujer/hombre luchadora/or”
La
lucha implica enfrentamiento, y trataré de explicarlo mejor: recuerdo que ella
quería comer en aquel exclusivo restaurant portugués Old Lisbon, por allí en
Coral Way y por supuesto yo quería complacerla, al llegar, el estacionamiento
estaba repleto de carros lujosos, no había valet parking y había una congestión
indeseable, sin mediar palabra di la vuelta para retirarme y tan solo pregunté:
¿deseas comer otro tipo de comida que no sea portuguesa? Ella impresionada me
invitó a luchar contra la adversidad y yo me negué, por ir esto en contra de mi
autoestima, les aclaro más: desde mi punto de vista no voy a ir a un restaurant
de lujo, hacer una cola de lujo, esperar porque me asignen una mesa de lujo, y
de paso pagar por el lujo, porque debemos preguntarnos si esto es así: ¿Cuál es
el lujo?
En
esta ocasión atenté contra mi autoestima, estábamos por el 2008 y toda una pléyade
de compatriotas me llamó, no podía faltar, sería un desayuno en petit comité,
era muy relevante mi presencia y yo sabía que nada era cierto. Claro que podía faltar,
el desayuno fue de lo más normal, mi presencia no fue relevante y de paso tuve
que calarme la habladera de tonterías que con un tono pontificio me fastidio
Hermann Escarrá por más de una hora. Me pareció ridículo que en aquel verano,
con el terrible calor de Miami él apareciera jugando al personaje con ese traje
negro y el pelo lleno de gomina, su proterva y adiposa presencia y esa suerte
de cara de intelectual que he aprendido a reconocer.
Haremos una
respetuosa carta a la corte celestial, con copia para los dignatarios a manera
de que quede registro de que este gobierno (el de Chávez) es…
Tengo
que confesar que no quise salir en la foto, me levanté de mi silla con la
excusa de ir al baño y delante de todos me fui, lo lamento, no soy tan educado
como parezco, pero he jurado no atentar contra mi autoestima y calarme ningún
tono pontificio de ningún leguleyo y resulta que he guardado un santo silencio
todo este tiempo, porque tengo algunas máximas a la que le doy estricto
cumplimiento: la primera de ellas es que no espero por ningún macho por más de
quince minutos, la segunda es que esperaré por la mujer que me atrae todos los años
que sean necesarios y la tercera es que no voy a reuniones sociales pantalleras
y donde no saque algún provecho personal, donde no obtenga algún provecho
profesional o donde no logre algún objetivo, de manera que están autorizados a
acusarme de pragmático interesado y tienen razón porque Ustedes son iguales
pero atentan contra su autoestima y por complacer a pendejos asisten a hacerle
las loas como lo hice yo a un tonto con tono pontificio.
asi es querido amigo y lo peor q la vaca esta dice q venezuela no esta pasando hambre porq el piensa solo en el q depravacion, que sinismo , dios los espera en el jucio final y en manos de Dios los entrego.
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