UNA MOSCA BLANCA

 

UNA MOSCA BLANCA

            Eso surgió en Washington en una de esas memorables conversaciones que he sostenido hace como veinticinco años con mi amigo John. Sí, estábamos hablando de algunas de nuestras comunes o tal vez poco comunes actitudes de ambos, probablemente por ello somos tan amigos y de repente lo soltó como una saeta: "seguramente con frecuencia te sentirás como yo, como si fuera una mosca blanca" y luego de eso tomé mi agenda y le dije: ese es un gran título, porque pueden estar seguros mis queridos lectores que con inusitada frecuencia así me siento y yo sé quién es el culpable de eso.

            El progreso invisible es el culpable y toda esa frase se traduce, en una palabra, "la lectura", sí, es la absoluta culpable de mi soledad pero también de mi felicidad y por supuesto mi progreso y paso a tratar de explicarlo mejor: la lectura se convierte en una cosa difícil, cuando te hace seleccionar las conversaciones y con quien las tendrás, como comprenderás, si lees, intentarás siempre entenderte con quien también lo haga y eso, por estos lares y por aquellos lares también, es un poco difícil, porque todos ahora tienen una profunda cultura general de Google y lo lamento, pero no es esa una referencia de imaginación creativa pero probablemente lo sea de la otra imaginación, la sintética, la cual es esa que toma de aquí y de allá para crear cosas mejores, y continúo explicándolo: la rueda se inventó 2500 años antes de Cristo, la maleta de acuerdo a ciertas evidencias arqueológicas fue inventada por los egipcios 1500 años antes de Cristo y fue en 1970 cuando un americano de nombre Bernard Sadow quien se dio cuenta que la maleta y la rueda hacían juego, ¿pueden creerlo?

            Con frecuencia me siento como una mosca blanca, no me consigo en ningún sitio bullicioso, el silencio para mi es esencial y al respecto conseguí algo que me hizo entender mi antisocial conducta: la felicidad comienza desde el silencio, pasa por la paz y se regodea en el gozo y fíjense que no es tan malo ser una mosca blanca, porque creo tener las tres anteriores, el silencio, la paz y el gozo que en mi caso siempre está basado en el agradecimiento, palabra mágica para entender la vida, luego podríamos agregar el perdón, pero esa es una materia paralela, digna de analizar desde otro ángulo.

            El progreso invisible te va alejando y créanme, mis amigos, que no es intencional, es absolutamente natural que no me encuentre muy bien en otro sitio que no sea viajando entre las líneas, viviendo la vida de los personajes, cambiando de manera invisible, inimaginable, intangible. Cuando despierto de lo anteriormente escrito, tengo la sensación de no haber hecho mucho en la vida, pero al ver la estela, me doy cuenta de la dulce situación de haber avanzado divirtiéndome y de ser diferente por añadidura, un poco complejo esto, ¿verdad?

            Hay algunas ventajas a saber: no te deprimes, estás siempre contento, vives con mayor intensidad, cuando viajas tienes la sensación de haber estado allí y además creo por experiencia, que las moscas blancas, somos felices.

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