EL DIRECTOR DE LA ORQUESTA

 

EL DIRECTOR DE LA ORQUESTA

            Siempre en contra de la manada, me lo remachó mi padre desde niño. En aquellas Semanas Santas, que eran poco santas en Venezuela, donde todos se iban a las playas a beber y bailar, pues, nosotros nos quedábamos en la abandonada Caracas y yo que era niño, no entendía por qué no disfrutábamos como todos los humanos, porque para mi ese era todo el planeta. Íbamos a almorzar a diferentes restaurantes, paseábamos y también asistíamos a los oficios y ahora desde la estela, veo que era la mejor manera de disfrutar.

      El director de la orquesta para poder ejecutar brillantemente, deberá darle la espalda a la multitud. Yo me he convertido en un experto al respecto, porque entiendo el mensaje de Robert Ringer a quien les recomiendo lean: ‘’Para poder ser el número uno de su propia vida y procurar por él, es el esfuerzo racional y consciente para pasar cuanto tiempo le sea posible haciendo aquellas cosas que mayor placer le proporcionan y el menor tiempo posible haciendo aquellas que causan dolor o que resultan desagradables’’.

            Mi muy querido y admirado tío, Héctor Jurado Toro, siempre recalcaba que él no hacía ni asistía a ningún evento, sitio o trabajo que no le divirtiera, parece que leyó a Ringer del que nunca hablamos, pero es exactamente así. Por favor no me inviten al estadio donde habrá 25.000 personas, no me parece racional, no me agrada, resulta para mi enervante, además no me gusta mucho el beisbol o el futbol y en eso también le doy la espalda a la multitud. Es lindante a la locura pelear entre fanáticos, bueno, la palabra lo dice, fanáticos, no me gustan los fanáticos, ni lo religiosos, ni los políticos ni los deportistas, son personas que no entienden, que no piensan, solo actúan de acuerdo con su fanatismo que les nubla el raciocinio.

            ‘’Si no basa usted sus actos en una decisión racional, carece usted de control sobre si mismo, y cualquier cosa que esté falta de control, es siempre peligrosa para ella y para cuanto la rodea’’.

            Hoy estoy muy contento, por varias razones: en primer lugar, porque le daré la espalda a la multitud y delegamos la gentil invitación de mi amigo a ver la premier de una película que desconozco y no sé si me divertirá, la segunda es porque iremos al lujoso Adrianne Arsh Center a ver un espectáculo que aseguro sí me divertirá y donde espero que el director me dé la espalda para que haga bien su trabajo. Iremos a disfrutar del ‘’Buena Vista Social club’’ y dejaremos que la imaginación vuele. Estaremos en un par de asientos escogidos muy cerca de la puerta y donde nadie me tropiece.

            No te sientas mal por ser diferente, al final de cuentas, tu vida es tuya y no de la multitud que intenta igualarte para que te les parezcas.

            Recuerda, tu objetivo es estar feliz la mayor cantidad de veces en un espacio de tiempo, debes hacer tu trabajo, darle la espalda a la multitud y tocar con maestría la música de tu propia vida.