EL MUSEO DE
LOS MÁRTIRES
Ya
lo ordenaron y creo que por la cantidad de mártires será una construcción de
magnitudes extraordinarias, corrijo, será inmensa, diez veces más grande que el
estadio de los Marlins en Miami, ¿qué digo esto? Será al menos ochenta veces más
grande que Fuerte Tiuna, no, pensándolo bien podría ser del tamaño del Estado
Bolívar.
Hace
pocas horas Nicolás Maduro acaba de ordenarle al poeta y titiritero (palabras
textuales de Maduro) Ministro del Poder Popular para la Cultura, el Señor
Freddy Nanez, la construcción en las instalaciones de cuartel San Carlos, del
MUSEO DE LOS MÁRTIRES DE LA REVOLUCIÓN y lo lamento, pero allí no caben treinta
millones de venezolanos.
Yo
puedo entender que el Presidente obrero no sepa contar, el que sabe contar es
el ingeniero de la obra del obrero, pero debemos advertirle que no es Luis
Tascón, ni el Fiscal Danilo Anderson, ni Eliecer Otaiza, no, déjenme que les
explique: Luis Tascón murió de cáncer, a Danilo y a Eliecer los mataron y por
supuesto nadie, pero nadie en el gobierno sabe quién lo hizo, pero todos los
demás si lo saben, ¿entendieron?
Los
verdaderos mártires de la revolución son todos los venezolanos sin excepción.
Maduro
ordenó a sus empleados en cadena nacional, que sean creativos y que el museo
tenga la última tecnología y las caras eran cuando menos desopilantes, expectantes,
lánguidas.
Con
frecuencia me prometo hacer el ejercicio inmenso de voluntad de no escribir
sobre los esbirros, pero debo confesarles que fallo, que no aguanto la pulsión,
la tentación, la inclinación incontrolable y ¡lo vuelvo a hacer! Y luego me
arrepiento, luego me castigo con un cilicio intelectual y me recrimino: ¿pero
si hay tantas cosas del conocimiento humano, porque escribir sobre esta
naturaleza caída de estos humanos, de estas personas que nada han aportado a la
humanidad?
Por
ahora, se le ha cedido al Ministro culturoso y titiritero, la feliz oportunidad
de pasar la cuchara a la olla, antes de la estrepitosa caída del gobierno y
engrosará con la intervención divina del Comandante Eterno esa suerte de jet set barinés, donde pronto
será millonario y todos nos preguntaremos: ¿y dónde está el MUSEO DE LOS
MÁRTIRES DE LA REVOLUCION?
Todos
saben que el museo está en sus casas, en sus calles, en sus ranchos, porque
todos son mártires del hambre y del HOLODOMOR
de la revolución, todos sabemos que caerán con la fuerza de la ley de
gravedad, mientras la Guardia Nacional, cuida que no se roben las piezas del
museo, porque nadie debe hacerlo primero que ellos, porque ahora todos son
iguales y porque Chávez prometió acabar con los pobres y lo está logrando, los
está diezmando o los está sacando del país con la ayuda del Presidente obrero.
que bueno y acertado escrito oportuno e incisivo.
ReplyDeleteQue magnifico chirelito le pusiste para condimentar ese hervido cruzado de museos y martires...incorporando ventrilocuos y titiriteros cual recao de olla, !!!DECRETO DE GUERRA A MUERTE!!! PARA LOS POBRES DE ESTE PUEBLO VENEZOLANO...realizado por el difunto bien muerto e insepulto..
ReplyDeleteBullseye!!!!!!!!!!!!!!
ReplyDeleteJusto en la diana, terminaran de raspar la olla...
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